coronavirus
La identificación de un conductor acaba con una temeraria fuga en Zaragoza
El joven, de 26 años, acabó detenido y se le imputan tres delitos, ya que circulaba de forma temeraria, sin carné y bajo el efecto de las drogas.
Ni las restricciones del estado de alarma ni el riesgo que entraña el contagio del coronavirus evitaron que algunos aprovecharan este sábado para excederse con el alcohol y las drogas. Solo que su temeridad pudo tener consecuencias graves, ya que uno de ellos sufrió un accidente en el barrio Oliver de Zaragoza y el otro acabó detenido tras una peligrosa huida por las calles de Santa Isabel.
Según informa la Policía Local, fue en torno a las seis y media de la tarde cuando una patrulla vio circular de forma anómala a un turismo y le dio el alto a la altura del número 2 de la avenida de la Industria. Durante estos días, tan solo se puede usar el coche de forma individual y para ocasiones muy concretas. Para aquellos que incumplen la norma, hay previstas sanciones de 300 a 1.000 euros, por lo que los agentes pretendían identificar al conductor del vehículo y comprobar si podía o no circular.
Sin embargo, cuando L. L. H., de 26 años, se percató de las intenciones de los funcionarios, pisó el acelerador y se dio a la fuga. Se inició entonces una persecución que terminó con la detención del joven, al que se le abrieron diligencias como presunto autor de tres delitos contra la seguridad vial. En concreto, por conducción temeraria, por circular bajo los efectos de drogas tóxicas o estupefacientes y por ponerse al volante careciendo de carné.
La Policía Local no ha aclarado si también se le denunciará por incumplir las restricciones de movimiento impuestas durante la crisis sanitaria, pero en tal caso, sería por la vía administrativa. Tras los correspondientes trámites, el infractor quedó en libertad a la espera de ser citado por el juzgado. El coche fue inmovilizado.
Accidende en Oliver
Pero no iba a ser este el único joven detenido a lo largo de la tarde, ya que, apenas un cuarto de hora después, un conductor de 27 años, identificado como R. A. G., sufría un accidente cuando circulaba balo los efectos del alcohol. Según fuentes del 092, el siniestro se registró a la altura de la residencia escolar Pignatelli, en el barrio Oliver. En principio, el conductor no sufrió lesiones leves, por lo que pudo someterse a la prueba de etilometría, en la que arrojó un resultado positivo. Por ello, se imputó un delito contra la seguridad vial y se trasladó su coche al depósito municipal. El joven quedó también en libertad, pendiente de ser citado por el juez.