Una edil de perfil autónomo ajena a las corrientes de ZEC

Teresa Artigas (Zaragoza, 1980) representaba el perfil más medioambientalista de la confluencia en ZEC. Ese era su bagaje, dado que es ingeniera Química especializada en Medio Ambiente y cuenta con un diploma de estudios avanzados en eficiencia energética y energías renovables en la Universidad de Zaragoza. Como funcionaria del Ayuntamiento, trabajó en el gabinete de Educación Ambiental.

Eso hizo que fuera concejal de Movilidad y Medio Ambiente, dado que casi todos los ediles de ZEC acabaron desarrollando tareas vinculadas a la actividad previa a la política. Pero además representaba al sector de los independientes de la confluencia, por no tener adscripción partidista, más allá de su militancia en el sindicato CGT. Al margen de esta cuestión, Artigas se ha mantenido ajena a las tensiones internas que se han producido en el seno de la formación entre los distintas corrientes que la integran (Podemos, IU y comunes).

Pivotaba entre los sectores, sin adscribirse nítidamente a ninguno de ellos, por lo que se ganó el respeto de todos. De hecho, muchos consideraban que era el "pegamento" por sus labores de mediación cuando ha habido problemas. Se valoró su papel como posible coordinadora de la campaña de ZEC.

Artigas, que hace tiempo que había hecho público que no iba a repetir, ha estado sometida a momentos de fuerte desgaste político, como en el caso Ecociudad, la huelga del bus, la ampliación del servicio Bizi, el azud o el traslado del rastro de La Almozara. Las limitaciones con las que se han topado y varios tropiezos en proyectos relevantes han restado lustre a su gestión.