Valorar la calidad de los productos locales y disfrutar del placer de comer. Estos son los dos objetivos que persigue la filosofía ‘slow food’ (‘comida lenta’). Un movimiento que nació, de forma espontánea, en Italia hace 30 años como respuesta a la apertura de un local de comida rápida en Roma, y que en los últimos años ha ganado adeptos, en todo el mundo con la finalidad de exaltar los alimentos frescos y caseros frente a los industriales, sobre todo, desde que la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación) reconociese oficialmente, en 2004, al Slow Food como una organización sin ánimo de lucro.

La Comunidad aragonesa ha decidido sumarse a este movimiento y, por este motivo, el estand de Aragón en la Feria Internacional de Turismo (FITUR), que se celebrará en Madrid del 23 al 27 de enero, presentará todas sus apuestas turísticas, entre las que se incluye la gastronomía, bajo este modo de vida, que busca desengancharse del ritmo vertiginoso del día a día, desconectar y encontrar la calma, redescubriendo y disfrutando de las verdaderas experiencias.

Vinos de Calatayud, Cariñena, Somontano de Barbastro o Campo de Borja; aceites del Bajo Aragón o de la Sierra del Moncayo, cebollas de Fuentes de Ebro, jamón de Teruel o melocotón de Calanda. Todos ellos cuentan con el sello de denominación de origen, pero no son los únicos productos agroalimentarios aragoneses que la Comunidad invita a conocer ya que los hongos, quesos, carnes, verduras o frutas, es decir, “todo aquello que se produce en nuestra región es lo que conforma un entramado de gran atractivo para los visitantes”, afirman desde la Oficina de Turismo de Aragón. Y es que, como aseguran, “para conocer Aragón tienes que sentirlo, ya que sentir sus sabores te hará vivir de forma muy intensa tu experiencia en esta tierra”. La variedad de productos, una gran tradición gastronómica y la influencia de culturas milenarias son el secreto que guarda la Comunidad.

Es por esta razón por la que se pretende apostar por un turismo que pueda descubrir Aragón de forma tranquila, saboreando cada producto de cada rincón, con la finalidad de poner en valor los productos locales y de combatir contra aquellos alimentos que son fabricados de forma industrial. Así, se ha creado un espacio denominado el Rincón de la Gastronomía, donde los asistentes a la feria podrán degustar los manjares aragoneses.

Tradición y vanguardia en Fitur 2019

Este año, la comarca Campo de Cariñena ocupará un lugar especial al haber sido elegida como Territorio Gastronómico de Aragón 2019, cada día se realizará una presentación de los productos más destacados de esta zona, entre los que sobresalen los vinos de la Denominación de Origen Cariñena, el aceite de oliva virgen extra de Alfamén, la miel de Aladrén, el jamón de Encinacorba, la trenza de la vendimia, los moscatelicos o los mudejaricos de Cariñena.

Asimismo, y con el objetivo de poner en valor el enoturismo en Aragón, se realizarán, todos los días por la mañana y por la tarde, catas de vino de las cuatro denominaciones de origen. También, el restaurante aragonés Trufé Catering, ganador del concurso de restauración para FITUR, elaborará en el propio estand tres platos con alimentos aragoneses, que los asistentes podrán degustar después. Sin embargo, la creatividad igualmente tendrá espacio en la apuesta gastronómica de Aragón en Fitur. Se recreará un bar en el que se podrán probar algunos alimentos aragoneses. Eso sí, todo ello dispuesto con el objetivo de salvaguardar y potenciar el patrimonio gastronómico aragonés, a través de la filosofía del ‘slow food’.