Alfonso Ballestín: "Los comentarios de políticos influyen en la desconfianza de los ciudadanos en la Justicia"

El magistrado defiende la independencia judicial en su discurso durante su toma de posesión como nuevo presidente de la Audiencia Provincial de Zaragoza.

El magistrado Alfonso Ballestín, durante la toma de posesión de su cargo como presidente de la Audiencia Provincial de Zaragoza.
El magistrado Alfonso Ballestín, durante la toma de posesión de su cargo como presidente de la Audiencia Provincial de Zaragoza.
Heraldo.es

Alfonso Ballestín Miguel tomó este viernes posesión de su cargo como presidente de la Audiencia Provincial de Zaragoza en un solemne acto que se celebró en el Tribunal Superior de Justicia de Aragón. El magistrado, de 62 años y natural de Gallocanta (Zaragoza), se dirigió a una abarrotada sala con un discurso que no dejó indiferente a nadie.

La independencia judicial o la desconfianza de los ciudadanos en la Justicia fueron dos de los ejes sobre los que pivotaron sus palabras. El magistrado recordó a los presentes que en esa desconfianza que la gente tiene en los tribunales "influyen mucho algunos comentarios de líderes políticos".

Ballestín puso varios ejemplos como el whatsapp que el "portavoz del grupo mayoritario del Senado" –refiriéndose sin nombrarlo a Ignacio Cosidó (PP)–. Tras la negociación de su partido con el PSOE, Cosidó envió un mensaje en el que alardeaba entre sus compañeros de que con el nombramiento de Manuel Marchena como presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, el PP se aseguraba "el control desde detrás" de la Sala de lo Penal y la sala del 061, es decir, la que se ocupa de juzgar a los aforados (y los líderes del ‘procés’) y la que aborda las ilegalizaciones de los partidos, respectivamente. Este comentario llevó a Marchena a presentar su renuncia al cargo.

El magistrado ilustró a los presentes con otro ejemplo más local, concretamente el de "un cargo político de la ciudad" (en alusión a Alberto Cubero, al que tampoco nombró) cuando afirmó que lo que decía la jueza encargada de resolver el contencioso de las trabajadoras del 010 le importaba "un carajo" y que "los jueces siempre ceden al chantaje de los poderosos en este país".

El presidente de la Audiencia quiso aprovechar la tribuna desde la que hablaba para dirigirse a los ciudadanos y transmitirles que esos comentarios "no son reales". "No deben confundir lo que son espúreos deseos de un senador con la realidad", dijo en relación a Cosidó; "ni tampoco la culpabilización de los jueces como pretexto justificativo de los propios fracasos ante la justicia", refiriéndose a Cubero.

Respecto a la independencia judicial, Alfonso Ballestín destacó que los jueces la están demostrando en muchos ámbitos, como los "derivados del separatismo radical". Mencionó las "amenazas"y "coacciones" que reciben y las "agresiones psicológicas mediante el uso persistente de lazos amarillos". Citó, igualmente, el caso Gürtel y al magistrado ponente de la sentencia, José Ricardo de Prada, al que "presionaron" y "vilipendiaron" con el objetivo de influir en su criterio. "Lo cual no consiguieron", subrayó.

El caso de la Manada tampoco escapó a su análisis –"la gente que se echó a la calle y nos dijo cómo teníamos que valorar las pruebas, como debíamos calificar jurídicamente unas conductas y qué sentencia debíamos poner"– y la presión que soportaron los jueces de la Audiencia de Navarra, que mantuvieron su criterio.

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