El atentado terrorista registrado el pasado martes en la ciudad francesa de Estrasburgo –con tres fallecidos y varios heridos– ha hecho que el Ministerio del Interior remita una circular a los distintos cuerpos policiales para recordarles que el país sigue en alerta 4 reforzada desde agosto de 2017, lo que sumado a la proximidad de las fiestas navideñas obliga a extremar la vigilancia en grandes capitales como Zaragoza. Por ello, a través de la Subdelegación del Gobierno, se ha comunicado a la Guardia Civil, Policía Nacional y Policía Local que sus agentes deben estar especialmente atentos a posibles amenazas en los denominados espacios estáticos: lugares en los que se producen grandes concentraciones de público por distintos eventos de ocio, deportivos y religiosos y en los mercadillos.

El ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska no ha pedido a las distintas policías un refuerzo especial de los dispositivos, ya intensificados desde hace más de un año. Lo que aconseja en esta ocasión a los funcionarios es utilizar los chalecos antibalas e incrementar más si cabe la precaución y la alerta con el objetivo de no pasar por alto ningún riesgo potencial.

Mercadillo navideño del Pilar

El ataque terrorista de Estrasburgo se dirigió contra su popular mercadillo navideño. Y será precisamente en todo el entorno de la plaza de Pilar de Zaragoza, donde se ha montado el tradicional belén y el resto de actividades vinculadas a las fiestas, donde más se incremente la vigilancia. De hecho, es junto a la basílica y las vías aledañas –paseo de Echegaray y Caballero, así como calles de Alfonso I y Don Jaime I, principalmente– donde más movimiento de público se produce estos días. Particularmente, durante los fines de semana y las vísperas de los días señalados de las festividades navideñas.

Según fuentes consultadas por este diario, el recordatorio del Ministerio del Interior no supondrá la instalación de nuevos maceteros o elementos disuasorios en las vías peatonales. Sobre todo, porque el Ayuntamiento de Zaragoza ya los colocó hace meses tanto en la plaza de España, como en la calle de Alfonso I y la trasera del Pilar, donde ahora está prohibido que se detengan los vehículos: incluidos los autobuses urbanos.

Además de en la plaza del Pilar, epicentro de las celebraciones navideñas, los distintos cuerpos de Policía intensificarán también su presencia en todos aquellos lugares de la ciudad donde se produzcan concentraciones de público. No solo en las zonas y centros comerciales, sino en todos los escenarios donde esté previsto celebrar alguna actividad multitudinaria como, por ejemplo, en todo el recorrido de la cabalgata de Reyes.

Las fuerzas de seguridad estarán más presentes y harán más controles aleatorios de personas y vehículos en zonas, plazas, paseos y grandes calles comerciales, muy frecuentadas en estas fechas. Estaciones, aeropuertos y carreteras también verán intensificadas sus medidas de seguridad, tal. La Subdelegación del Gobierno en Zaragoza ha recordado a los agentes la necesidad de reforzar su autoprotección. El Ministerio quiere contar también con las capacidades de la seguridad privada.