"Es una vergüenza que la Justicia no tenga medios para resolver los 356 asesinatos sin esclarecer de ETA"
La Fundación Giménez Abad debate este miércoles en Zaragoza sobre terrorismo junto a una veintena de expertos.
Los ponentes de la jornada sobre terrorismo que se celebra este miércoles en el palacio de la Aljafería han denunciado la "vergüenza" que supone que la Justicia española no tenga medios para resolver los 356 asesinatos aún no esclarecidos de la banda terrorista ETA. Andrés González, teniente coronel del Ejército de Tierra, ha lamentado que la sociedad "no se movilice lo suficiente" y ha recordado que detrás de estas 356 víctimas "hay 356 familias". "Le podría haber tocado a cualquiera", ha recalcado.
El encuentro, organizado por la Fundación Manuel Giménez Abad y el Instituto Español de Estudios Estratégicos, también ha abordado la polémica existente en torno a la memoria histórica. Para Joaquín Leguina, literato y expresidente de la Comunidad de Madrid, la historia "tendría que quedar en mano de los historiadores" y no de los parlamentos, opinión con la que ha coincidido el catedrático de Historia Contemporánea Fernando García de Cortázar.
Que se pretenda imponer una versión es, a su juicio, "una aberración". El problema, de acuerdo con González, es que "la memoria es un campo de debate político". "Pero hay memorias que son venenosas, ya que no nos permiten olvidar, y hay cosas que hay que olvidar porque no nos hacen bien. No podemos vivir instalados en la obsesión y el fracaso", ha puntualizado.
La jornada también ha abordado el terrorismo actual. "Los terroristas consideran que el ser humano es un medio para conseguir unos fines supuestamente superiores. No solo provocan muertes y lesiones, sino que se insertan en una sociedad que tiene que vivir con esa rémora", ha recalcado.
Se ha referido, asimismo, al ciclo "altamente peligroso" que se vive en el siglo XXI "por la proliferación de integrismos religiosos que buscan la expansión violenta de sus dogmas". González, por su parte, ha destacado que "tanto la guerra como el terrorismo son actos políticos". "Pero no son instrumentos de cambio, sino mecanismos de ruptura del orden político y de disolución de lo que había antes. Son los actos políticos más relevantes a los que se enfrenta un Estado y una sociedad", ha subrayado.
