El veterano David Ramírez 'Peque' gana el concurso de recortes con toros de fuego
El madrileño Javier Pradanas fue segundo y el turolense José Luis Alegre Josete quedó tercero y recibió una cornada en el glúteo, de la que se recupera en el hospital.
La noche del sábado 13 de octubre de 2018 se disputó la VIII edición del Concurso de Recortes con Toros de Fuego en una plaza de la Misericordia casi llena. El mayor recortador sobre el ruedo, el madrileño David Ramírez Peque, se alzó con el triunfo como broche de oro a su temporada número 25 en activo. El toro de la final, un precioso albahío numero 464 de la ganadería portuguesa Canas Vigouroux, fue embolado por la cuadrilla madrileña de Colmenar de Oreja. A este blanco cornúpeta le endosó un quiebro de rodillas en el tercio y dos interiores en tablas. El también madrileño Javier Pradas quedó segundo con tres espectaculares saltos, dos tirabuzones y uno del ángel.
El aragonés José Luis Alegre Josete (Santa Eulalia del Campo, Teruel) recibió el tercer premio desde la enfermería, ya que fue cogido en la final al ejecutar un reverso. El toro le corneó en el glúteo y tuvo que ser trasladado al hospital, donde se encuentra estable. También se encuentran ingresados todavía recortadores de otros concursos, como el aragonés Ángel Pitarque (con dos cornadas, una en cada muslo) y el castellano-leonés Pablo Martín Guindi (con una cornada en el muslo izquierdo). El embolador de Ricla José Luis Abellán Rufino se recupera también de una fractura de la órbita ocular.
Pasó a la final del concurso también el flamante campeón del goyesco César Grasa (Mediana de Aragón, Zaragoza), aunque esta vez con menor fortuna. La nómina de cinco participantes aragoneses se completó con los zaragozanos Cristian Júlvez Punky y David Ferrer y el turolense de Formiche Alto Bruno Monferrer. Estos dos últimos tuvieron muy mala suerte, ya que el toro de su grupo, el 463 de Canas Vigouroux, sufrió algún problema de vista y sólo pudieron recortarlo en una ocasión. Se lidiaron también otros dos ejemplares de la ganadería francesa de Gallon y embolaron las cuadrillas de Épila, Ricla y Emboladores de Navarra y Aragón.