La comarca tramita quejas de ayuntamientos y vecinos por el servicio de recogida de basuras

La comarca de la Ribera Baja del Ebro está tramitando quejas de los ayuntamientos y de vecinos respecto al servicio de recogida de basuras que, según denuncia la institución, es "cada vez más deficiente". Los escritos van acompañados por fotografías que muestran el mal estado en el que se encuentran algunos contenedores. Los alcaldes de los 10 municipios han elaborado un informe sobre los posibles incumplimientos del contrato por parte de Seula. Esta información se trasladó a responsables de la empresa. En el pleno celebrado ayer por la tarde, la institución comarcal comunicó a los consejeros la tramitación del expediente sancionador por las infracciones que se han detectado.

La presidenta de la Ribera Baja del Ebro y alcaldesa de Cinco Olivas, Felisa Salvador, trasladó su malestar por esta situación: "Existe una dejadez absoluta y un descontrol total. Hay una falta de respeto tremenda y sentimos una gran impotencia, porque el juez no resuelve y no podemos hacer nada, a pesar de que todo el mundo se queja".

La comarca adjudicó la contratación del servicio de recogida de basuras a Seula por un periodo de cuatro años iniciales prorrogables después de año en año. Sin embargo, según denunciaron, "el servicio comenzó a ser defectuoso de forma gradual y, antes de cumplirse el octavo año de contrato" decidió rescindirlo y licitarlo de nuevo. La empresa que ganó fue Norvert Sorigué, pero la anterior mostró su desacuerdo con la valoración de puntos y llevó el caso ante el Tribunal Administrativo de Contratos Públicos de Aragón (Tacpa), que suspendió la adjudicación hasta que el litigio estuviera resuelto. Desde la comarca de la Ribera Baja del Ebro dieron un paso más e impugnaron la resolución del Tacpa ante la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Aragón que, posteriormente, denegó las medidas cautelares solicitadas desde la institución.

De esta manera, el proceso se ha ido alargando en el tiempo y, mientras tanto, la empresa Seula continúa prestando el servicio de recogida de basuras, "a pesar de que supone un sobrecoste de casi 45.000 euros al año comparado con el precio ofrecido por la empresa ganadora de la adjudicación". Además, tal y como pusieron de manifiesto desde la comarca, "la calidad del servicio, a sabiendas de que su contrato de adjudicación tiene fecha de caducidad, ha ido disminuyendo progresivamente en los últimos meses, generando numerosas quejas de vecinos de todos los municipios". Así, "están aprovechando para no hacer la reposición de contenedores que corresponde". La vida útil de un equipamiento de este tipo son cuatro años: "Pero tenemos algunos desde hace más de ocho años, que están en un estado lamentable". Lo mismo sucede con los camiones, que son propiedad de la comarca, dijo Salvador, pero cuyo mantenimiento corresponde a la empresa adjudicataria. La nueva compañía se había comprometido a quedarse con estos vehículos y a ofrecer una cantidad económica por ellos: "El importe será mucho menor cuando se resuelva el conflicto porque los camiones estarán en peores condiciones".

La comarca ha decidido abrir a la empresa un expediente sancionador por incumpliendo de contrato, y anima a los vecinos a que presenten sus quejas al respecto rellenando un impreso que pueden encontrar en los ayuntamientos. "Todos los alcaldes llevamos meses teniendo reuniones para intentar solucionar el problema, pero el resultado es que los camiones están en malas condiciones, los contenedores están en mal estado, falta limpieza, se producen malos olores y seguimos esperando una resolución judicial que nos está costando mucho dinero de más a todos los vecinos de la Ribera Baja", añadieron desde la comarca. Este periódico intentó este jueves sin éxito ponerse en contacto con Seula.