El zaragozano que se fugó tras atacar a su mujer con una catana, detenido en Salamanca

La investigación de la Policía de Zaragoza y la orden judicial de búsqueda y captura facilitó su arresto ayer por la mañana

La vivienda en la que se produjo el apuñalamiento de la mujer en la calle Oviedo 32-34 en Torrero.
La vivienda en la que se produjo el apuñalamiento de la mujer en la calle Oviedo 32-34 en Torrero.
José Miguel Marco

La investigación del grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de la Policía de Aragón permitió ayer por la mañana la detención en Salamanca del hombre que presuntamente apuñaló a su pareja con una catana la madrugada del pasado domingo en una vivienda de la calle de Oviedo 32-34, según confirmaron fuentes policiales a HERALDO.

El juez de instrucción había dictado una orden de búsqueda y captura para la Policía española y también la trasladó a la Europol por si José María S. G. había escapado del país, después de que no fuera localizado en Zaragoza. Fuentes policiales confirmaron que el agresor llevaba al menos dos días en Salamanca y la investigación del grupo de Homicidios zaragozano sirvió para que sus compañeros salmantinos llevaran a cabo la detención.

Al parecer, el seguimiento que se hizo en Zaragoza y del teléfono móvil lo situó en Salamanca, donde tenía algún contacto.

Asimismo, el responsable del grupo de Homicidios avisó a la víctima, que sufrió la puñalada en la ingle y fue dada de alta del hospital Miguel Servet el pasado lunes, porque la detención del presunto autor supone que la vigilancia policial los 24 horas se rebaja, al no haber riesgo. El traslado del detenido desde Salamanca a Zaragoza no se producirá hasta el próximo fin de semana, según fuentes policiales, cuando pasará a disposición del juzgado de instrucción que esté de guardia para prestar declaración.

El agresor se había dejado ver la mañana del lunes en algunos de los bares del barrio de Torrero que solía frecuentar y cerca del cementerio, aunque no saludó a los vecinos que lo conocen. «He visto a Chemari, pero no me ha respondido nada», señaló una vecina del barrio sorprendida de la reacción de José María S. G. cuando lo vio cerca del camposanto.

El grupo de Homicidios estaba siguiendo varias pistas del agresor, que no tiene antecedentes, en el barrio de Torrero, en el Actur (donde reside un familiar suyo) y en la casa de un amigo.

Chemari llegó a presentarse en la madrugada del domingo (no el martes, como se publicó ayer) en la vivienda en la que se produjo el apuñalamiento para desvalijarla y llevarse las cadenas de oro de la víctima, según detallaron varios vecinos. Parece que el objetivo era preparar su huida fuera de la capital aragonesa.

«Igual emprende una fuga ahora que se ha llevado el oro porque no va a suicidarse», explicó entonces una vecina consultada. Después de haberse llevado las joyas de la víctima, Chemari mandó un wasap a su pareja que ahora se revela como una despedida: «Te querré siempre», decía el mensaje.

La Jefatura Superior de Policía de Aragón difundió el retrato del agresor por todo el país a través de la orden de búsqueda y captura. Algún investigador de Homicidios se sorprendió al principio de que apareciera en Salamanca.

Fuentes policiales señalaron que pensaban que la detención se practicaría en Zaragoza, sobre todo después de los seguimientos realizados en varios puntos de la ciudad. Tras la localización de su teléfono en Salamanca, la detención fue tan solo cuestión de horas.

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