Cuenta atrás para la reforma del Albergue Municipal de Zaragoza, que costará 3,3 millones de euros

La rehabilitación tiene un plazo de ejecución de 16 meses previsto a lo largo de 2019 y 2020.

La consejera de Derechos Sociales, Luisa Broto y el director del Servicio de Arquitectura Ricardo Usón esta mañana en el albergue.
La consejera de Derechos Sociales, Luisa Broto y el director del Servicio de Arquitectura Ricardo Usón esta mañana en el albergue.

La reforma del Albergue Municipal de Zaragoza comenzará a ser una realidad a partir de 2019 con el inicio de la rehabilitación del antiguo cuartel de San Agustín. La consejera de Derechos Sociales, Luisa Broto, junto con el director del Servicio de Arquitectura, Ricardo Usón, han visitado las instalaciones del centro este martes, donde han explicado en qué consistirá la futura reforma. 

El actual albergue comenzó su andadura en septiembre de 1989 y el pasado 13 de julio se aprobó el proyecto de reforma, el cual cuenta con un presupuesto de 3,3 millones de euros y se irá realizando a lo largo de 2019 y 2020. Una de las motivaciones que impulsaron este nuevo proyecto fue "conseguir un edificio de mayor calidad" tanto en lo que respecta a infraestructuras como en la prestación de los servicios. La característica principal de esta reforma pasa por dotar al albergue de un edificio nuevo que permitirá mejorar los accesos y la recepción de las personas usuarias. "El modelo de atención a las personas sin hogar ha cambiado", aseguró la consejera. Es por ello que uno de los cambios será la construcción de una recepción en la que se puedan atender mejor las preocupaciones de los interesados.

En el pabellón del antiguo cuartel se instalarán los servicios técnicos del albergue y los servicios sociales de la Magdalena, con los que se busca "enriquecer el barrio", manifestó Broto. Además, con el objetivo de mejorar las relaciones sociales entre las personas sin hogar, se instalarán "unas salas de uso comunitario" en las que puedan pasar tiempo. Además, "se llevarán a cabo actividades o talleres", aseguró, para apoyar al avance de las relaciones sociales de los usuarios.

Para entrar a las instalaciones se habilitarán tres entradas desde la calle Alonso V, los patios interiores y la calle Asalto. Con todas las reformas por hacer, se busca "desarrollar una modernización y conseguir una mejora en la funcionalidad", como aseguró Usón. Es por ello que se instalarán tanto unas escaleras como un ascensor que ayudarán a las personas con movilidad reducida. También podrán acudir al edificio los animales de compañía de las personas sin hogar.

El edificio tendrá su parte ecológica en la que a través del agua "se conseguirá la eficiencia energética", explicó Usón, quien justificó que por este motivo la obra se ha encarecido un poco al principio pero terminará siendo mejor en un futuro. La infraestructura será moderna, pero según asegura el arquitecto "no tendrá impacto visual y quedará integrada con el resto del edificio". 

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