Sin pistas de Celia, una galga enferma perdida en Garrapinillos

Su nombre es Celia y es una galga de dos años que el jueves 5 de julio desapareció mientras la llevaban de paseo en los alrededores de Garrapinillos. Desde entonces, sus dueños no saben nada de ella y la buscan desesperadamente para intentar dar con su paradero.

"No tenemos ninguna pista, es como si se la hubiera tragado la tierra", asegura Águeda Bueno, que desde hace siete meses tiene a Celia en acogida a la espera de encontrar una familia definitiva para ella. El animal procedía de la protectora Azar Zaragoza, una entidad que también se está volcando con la búsqueda. "Hemos realizado batidas, pegado carteles, preguntado a pastores y nada, no hay resultado", lamenta Bueno. También se han puesto en contacto con la Guardia Civil y con el servicio de mantenimiento de carreteras de Zaragoza, pero por el momento, nadie ha visto a Celia.

Encontrarla es una prioridad para la familia, no solo por lo que la echan de menos, sino porque está enferma: "Tiene lehismaniosis y requiere de medicación diaria", explica su dueña.

Es un galgo negro de tamaño mediano, con el pecho y la punta de las patas blancas. Además, lleva el chip identificativo reglamentario y está esterilizada. "No sirve para la cría y también fue descartada para cazar", apunta Bueno, que asegura que Celia "es miedosa con la gente que no conoce, aunque es bastante cariñosa". Además se lleva bien con otros perros, ya que compartía casa con otros dos animales. "Estaba muy unida a mi otra perra, por lo que no entiendo porque se separó de ella", explica su dueña.

La familia y la protectora continúan con la búsqueda del animal -han llegado a pedir por Facebook la colaboración de alguien que tenga un dron para tratar de localizarla- con la esperanza de que alguien pueda darles una pista que lleve a Celia de vuelta a casa.