La (e)moción invade el pleno

La votación del Congreso se siguió muy de cerca en el Consistorio, pero la alianza de PSOE y Podemos en Madrid no evitó la bronca y la ruptura en la izquierda municipal.

Santisteve interrumpió el pleno para celebrar la moción de censura en el Congreso
PSOE y CHA se niegan a volver a negociar con Santisteve si no rectifica con las sociedades
D. Marcos / Ayuntamiento

La moción de censura que este viernes derribó el Gobierno de Mariano Rajoy no solo se coló en el pleno municipal del Ayuntamiento de Zaragoza, sino que lo inundó. En los pasillos o desde la bancada, a través del portátil o el teléfono móvil, e incluso en la radio con auriculares. Todos los concejales siguieron con atención el recuento de votos del Congreso de los Diputados, que no solo centró algunos de los debates –CHA presentó una moción de urgencia sobre corrupción para aprovechar la tesitura–, sino que el propio alcalde de la ciudad llegó a parar la sesión.

«Se ha procedido ya a la votación en el Congreso de los Diputados, en la que al parecer ha resultado aprobada la moción de censura», anunció Pedro Santisteve, que seguía con atención lo que en Madrid acontecía a través de una ‘tablet’. El alcalde celebró que el Congreso utilizara «la principal herramienta que debe tener un parlamento soberano que es ejercitar su derecho a que este país sea limpio en higiene democrática», declaró con su peculiar retórica.

Por ello felicitó «al nuevo presidente, el señor don Pedro Sánchez», tras lo cual se levantó a aplaudir junto al resto de su concejales, que celebraron incluso con más efusividad que los cuatro ediles socialistas que ese momento estaban presentes en el salón de plenos.

De hecho, la concordia de los grupos de izquierdas en el Congreso no se vio reflejada en la capital aragonesa. El portavoz del PSOE, Carlos Pérez Anadón, afeó al primer edil que anunciara el triunfo de Sánchez cuando él y parte de su grupo se encontraba fuera del salón de plenos, precisamente siguiendo por la televisión el desenlace de la moción.

Tampoco perdió oportunidad el PP, que publicó en su cuenta de Twitter un vídeo mofándose del entusiasmo de los comunes ante el cambio en la Moncloa, algo que para el portavoz de los conservadores, Jorge Azcón, estaba orquestado para «ridiculizar» a los concejales socialistas.

Y a todo esto, la celebración de la bancada de la izquierda llegó cuando los vecinos del barrio Oliver estaban planteando sus demandas y reivindicaciones al equipo de gobierno, lo que fue duramente criticado por parte del edil de Ciudadanos Alberto Casañal. «A mi se me caería la cara de vergüenza», recriminó al alcalde.

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