José Domingo Ceniceros Molina, un vecino de Ejea de los Caballeros de 73 años, murió este sábado atropellado por un turismo cuando circulaba con su bicicleta por la carretera A-125, a apenas un kilómetro del casco urbano de la capital de la comarca de las Cinco Villas.

Según explicaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Zaragoza, el accidente mortal se registró pocos minutos antes del mediodía a la altura del kilómetro 41 de la citada vía. El conductor del turismo involucrado en los hechos dio negativo en las pruebas de alcoholemia y drogas, según agregaron las mismas fuentes.

La zona en la que se registró el accidente es una isleta que cuenta con abundante señalización horizontal y vertical, ya que se trata del punto en el que la antigua travesía de la localidad (conocida como carretera de Erla por los vecinos) se une a la variante, inaugurada hace algo más de cuatro años. En el momento del siniestro, el ciclista circulaba por la travesía en sentido salida del casco urbano, mientras que el turismo, un Renault Clio, iba por la A-125 en dirección Tudela. Según las primeras investigaciones, el atropello se produjo cuando el fallecido trataba de incorporarse a la vía por la que viajaba el vehículo.

A consecuencia del accidente, la rueda trasera de la bicicleta quedó totalmente destrozada, mientras que el coche presentaba daños en la parte delantera y en el faldón, por lo que todo parece indicar que ambos vehículos circulaban en la misma dirección. No obstante, las circunstancias del siniestro tendrá que esclarecerlas el equipo de atestados de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, cuyos agentes se desplazaron hasta el lugar de los hechos para tomar evidencias.

Hacia las 13.00, el juez de guardia autorizó el levantamiento del cadáver, que fue trasladado hasta las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA), donde está previsto que hoy se le practique la autopsia.

Segundo atropello mortal

Este es el segundo atropello mortal que se registra en el término municipal de Ejea en lo que va de año. De hecho, el otro accidente sucedió hace poco más de un mes, el 27 de marzo, cuando un repartidor atropelló con su furgoneta a un joven ghanés de 23 años que caminaba de noche por el arcén de la A-125, cerca de la cooperativa Virgen de la Oliva.

El conductor se dio a la fuga y fue detenido 36 horas después del siniestro en Zaragoza. El juez declaró su ingreso en prisión provisional, aunque tras pasar una semana en Zuera quedó en libertad con cargos. El hombre, de 56 años, reconoció haber tenido un accidente en la A-125 pero que pensó que había golpeado a un animal. Aseguró que, tras el impacto, paró y miró alrededor pero no vio nada, por lo que optó por seguir su ruta.