Detenida una banda que ha robado a Inditex unos dos millones de euros en ropa

La Policía Nacional ha desarticulado en Zaragoza un grupo criminal que desde hace tres años sustraía de forma regular ropa propiedad de Inditex y de otras empresas dedicadas a la fabricación de complementos y cosmética. La mayoría de los arrestados –nueve hombres y dos mujeres– son conductores de camiones de empresas subcontratadas por la multinacional textil para transportar mercancía a países de la Unión Europea.

El modus operandi de la organización consistía en sustraer una mínima parte de la carga del remolque y luego venderla a menor precio en la capital aragonesa o trasladarla en grandes cantidades a Rumanía, país de origen de todos los implicados. De esta forma, a lo largo de tres años han conseguido, sin levantar sospechas, hacerse con un botín en prendas de vestir que supera los dos millones de euros, Todavía queda por averiguar de dónde procedía el resto de efectos, tales como bolsos, zapatos y perfumes de marcas como Carolina Herrera, Chanel o Dior, entre otros.

Cuatro de los detenidos -uno de los presuntos cabecillas, su mujer, su madre y uno de los chóferes- han quedado en libertad provisional tras declarar ante la juez de guardia, asistidos por los abogados José Luis Melguizo y Eloísa Gimeno.

El resultado de la operación policial, denominada ‘XXL’, ha sido presentada este viernes por el delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, que felicitó por la misma al jefe superior de Policía, José Ángel González; al jefe de la Brigada de Policía Judicial, Antonio Palomo, y al subinspector jefe del Grupo de Hurtos, Marco Pérez.

Este último ha explicado que la investigación se inició a principios del verano con la detención de un ciudadano rumano que intentó saltarse un control de carretera y fue interceptado por agentes de la comisaría de Delicias. En el maletero del vehículo hallaron prendas valoradas en 3.200 euros, cuya procedencia no supo justificar. A partir de ese momento descubrieron que esta persona era camionero de una empresa de transportes que trabaja para Inditex.

«Averiguamos que tenía un grupo de cómplices, varios de ellos conductores, que estaban robando ropa de los camiones que ellos mismos transportaban», ha contado. En un segundo escalón situaron a los colaboradores, encargados de la distribución y posterior venta de estos artículos.

A partir de ahí dieron con el núcleo de la organización, compuesto por once personas. «Los pudimos detener justo en el momento en que los camioneros hacían la entrega de mercancía a sus cómplices en el polígono de Plaza», ha dicho. Marco Pérez ha subrayado que aunque los conductores desarrollaban su actividad principalmente con Inditex, también hacían transportes para otras empresas de perfumería o componentes tecnológicos. «Atacaban a todo lo que pudieran portar», ha señalado.

Una vez sustraída la mercancía, la remitían a dos domicilios de Zaragoza y partir de ahí esos pisos actuaban como tiendas. «Incluso en alguna vigilancia pudimos comprobar cómo se remitían a Rumanía en cantidades considerables», ha comentado.

El jefe del grupo ha manifestado que las prendas de robaban suponían una mínima parte de la carga que llevaban en relación con lo que cabe en un remolque de esas dimensiones, que puede transportar hasta un millón de euros en textil. «El volumen que mueve esta empresa es tal que no es fácil detectar sustracciones pequeñas», dijo. Los investigadores calculan que en cada golpe se apoderaban de entre 5.000 y 10.000 euros.

El comisario jefe Antonio Palomo, que ayer se despedía de la Jefatura de Aragón para ocuparse de su nuevo destino en Alcobendas (Madrid), contó que los camiones iban y venían precintados y creen que desmontaban las puertas de las bisagras. La investigación sigue abierta para averiguar el canal de sustracción de los perfumes. En la operación ha participado también el Grupo de Operaciones Especiales y el helicóptero de la Policía.