Un taxista drogado hiere a dos policías al intentar darle el alto en la calle de Boggiero

Un agente tuvo que introducirse en el coche para reducir al conductor y quitar las llaves del contacto.

La Operación Shalom de la Policía Nacional se ha desarrollado a lo largo de los últimos días en Zaragoza.
Se le imputado el delito de atentado a los agentes de la autoridad.
HA

Un taxista de 34 años, identificado como S. H. E., fue detenido en la madrugada de este miércoles tras protagonizar un incidente en el que resultaron heridos dos agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Los hechos se produjeron a las 3.30 en la calle de Boggiero, muy cerca de la sala de fiestas Oasis, donde el conductor chocó contra una farola.

Alertada del accidente, hasta el lugar del suceso se trasladó una patrulla de la Policía Local, que encontró al taxista y único ocupante del vehículo dormido en el asiento del conductor. Según el atestado, al sentir la presencia de los municipales, S. H. E. se despertó y reaccionó de forma "airada". Los funcionarios le pidieron que bajara del taxi y se identificara, pero en lugar de hacerlo, puso en marcha el motor y empezó a hacer maniobras para intentar huir.

Como el taxista no deponía su actitud y su fuga podía representan un importante peligro, uno de los policías locales decidió abrir la puerta del copiloto e introducirse en él para quitar las llaves del contacto.

En ese momento, el conductor pisó el acelerador y movió el coche unos cinco metros, golpeando a uno de los policías nacionales que habían acudido a ayudar a los locales. El vehículo se detuvo porque el agente que se había metido dentro logró tirar del freno de mano. Pero al acometer al nacional, le atrapó una pierna contra la protección de la farola.

Ni siquiera cuando el coche quedó completamente detenido su conductor se mostró colaborador. Es más, los agentes necesitaron varios minutos para lograr reducirlo. Al final, uno de los policías fue asistido por un aplastamiento de la pierna derecha de pronóstico menos grave. El otro tenía una contusión leve en una mano. El detenido dio negativo en la prueba de alcoholemia, pero el test de drogas detectó que había tomado cocaína. Tras declarar ante el juez quedó en libertad, investigado por un delito de atentado y otra contra la seguridad vial.

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