El juez envía a prisión al autor del atropello múltiple de Casetas y deja libre a su acompañante

El joven reconoce que era él quien conducía el coche, por lo que la la Fiscalía no pidió cárcel para la mujer que ocupaba el asiento del copiloto. En cualquier caso, seguirá investigada por omisión de socorro.

El conductor se dio a la fuga tras atropellar a tres personas en el barrio de Casetas.
Los detenidos por el atropello múltiple abandonaron el coche en la calle Moncayo de Casetas.
José Miguel Marco

El conductor ebrio y drogado que el pasado lunes sembró el pánico en el barrio zaragozano de Casetas al subirse a la acera y arrollar a tres personas ingresó este miércoles en la prisión de Zuera. Así lo ordenó el titular del Juzgado de Instrucción número 5 tras tomar declaración a Adam B., de 25 años y al que atribuye un delito de conducción temeraria, otro de omisión de socorro y tres de lesiones.

Ante la gravedad de los hechos y una vez escuchadas las explicaciones del encausado, la Fiscalía pidió al magistrado Antonio Robledo que decretara para él prisión provisional o, de forma alternativa, libertad con fianza. Sin embargo, el juez optó finalmente por la medida cautelar más severa.

Además de al joven, nacido en España, la Guardia Civil detuvo también el lunes a la mujer que circulaba con él en el BMW X3, de 26 años, con pasaporte cubano e identificada como L. V. C. En principio, ambos se negaron a prestar declaración ante los investigadores en la Comandancia de Zaragoza, por lo que no se pudo aclarar quién conducía el coche y a ambos se les atribuyó la misma responsabilidad.

Pero Adam B. confesó este miércoles ante el juez de guardia que era él quien iba al volante cuando se produjo el accidente y que la joven ocupaba el asiento del copiloto. De ahí que a esta solo se le impute ahora un delito de omisión de socorro y que la Fiscalía no pidiera prisión provisional para ella. De hecho, el magistrado decidió dejarla libre pero, como medida preventiva, le retiró el pasaporte y le obliga a comparecer periódicamente en el juzgado.

Dicen que no sabían que había heridos

Según explicó ayer el abogado Javier Cestero Brualla, designado por el turno de oficio para asistir a la pareja, al saber que había heridos ambos lamentaron lo ocurrido y preguntaron enseguida por su estado. Según declaró ante el juez, el conductor pensó que al perder el control del vehículo y subirse a la acera se había llevado por delante alguna de las mesas de la terraza del bar avenida. Nunca creyó, aseguró, que hubiera víctimas.

Pero lo cierto es que tras embestir a un matrimonio de jubilados –Jesús Alonso y Rosa María Híjar (ella sigue en la uci)– y al gerente de la empresa Delifactory –Carlos Pérez-Aramendía, de 45 años–, los ocupantes del coche continuaron rodando al menos 50 metros por la acera de la avenida de Logroño. Al llegar a la esquina con la calle de Huesca, giraron a la derecha y se dieron a la fuga en dirección contraria. A unos 200 metros del lugar de los hechos, junto a la antigua Harinera del Ebro, abandonaron el BMW X3 y continuaron huyendo a pie.

Como informó HERALDO, la Guardia Civil logró averiguar que los fugados se habían refugiado en un hotel de la cercana localidad de Utebo, donde finalmente los detuvo sobre la una de la tarde. Preguntados por la huida, los jóvenes explicaron ayer al juez que se asustaron y decidieron regresar al establecimiento donde estaban hospedados. Porque, según los encausados, estuvieron el domingo de fiesta y después se fueron a descansar a dicho hotel. Es más, mantienen que el lunes por la mañana salieron a dar una vuelta con el coche y fue cuando se produjo el atropello.

Sobre el positivo en drogas y alcohol, Adam B. asegura que solo bebieron, por lo que tuvieron que ponerles algo en las consumiciones. Al parecer, el joven es diabético, por lo que tampoco descarta haber sufrido algún desmayo por la subida de azúcar.

En cuanto al dueño del BMW X3, la Benemérita consiguió hablar con él este martes y descartó totalmente su implicación en el atropello. Al parecer, se trata de un amigo de la pareja y se lo había prestado.

Uno de las víctimas del atropello múltiple, Jesús Alonso, aseguró este miércoles a este diario que al ver venir al coche hacia ellos pensó que podía tratarse de "un atentado como el de Barcelona".

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