La ciudad de los prodigios

Teresa Artigas se suma a la iniciativa que promueve beber agua del grifo.

Teresa Artigas, la fuente, un poto y un extintor.
Teresa Artigas, la fuente, un poto y un extintor.
G. Mestre

La iniciativa (promover que se beba agua del grifo) puede no ser mala, pero la verdad es que hace falta cuajo para convocar a los medios a la inauguración de un dispensador de agua en el Ayuntamiento de Zaragoza. Ayer lo hizo la concejal de Medio Ambiente, Teresa Artigas, que ante las cámaras rellenó un vaso y una botella de –¡oh, maravilla!– el líquido elemento, y éste además –agárrense, que viene algo ‘wonderful’– ¡salía de un grifo! Bravo. Viva. Y brava ella también. ZEC sabe cómo mantener las expectativas de sus convocatorias de prensa por todo lo alto y, después de invitarnos a ver un contenedor de basura y una máquina expendedora de comida, ahora llega el virtuosismo de una fuente de agua. ¡Cosas del ‘pogreso’!