Condena unánime de las instituciones y de los partidos al nuevo crimen machista

Instituciones y partidos políticos unieron ayer su voz para condenar de forma unánime el asesinato de una mujer de 37 años por parte de su compañero sentimental en Zaragoza en la madrugada de este lunes, el primer crimen machista en lo que va de año en Aragón. Las reacciones no se hicieron esperar y a lo largo de la mañana se sucedieron concentraciones y minutos de silencio, además de comunicados de reprobación y la orden de bajar banderas para dejarlas a media asta como muestra del luto oficial.

El Gobierno central encabezó el rechazo a la violencia y por boca de su ministra de Sanidad, Carmen Montón, aseguró que le "duelen las víctimas de violencia de género". El presidente aragonés, Javier Lambán, trasladó su "dolor y repulsa" a través de las redes sociales, y exhortó a trabajar unidos y responder con rotundidad "para acabar de una vez por todas con la expresión más extrema de la desigualdad entre hombres y mujeres".

En representación del Gobierno autonómico tomó la palabra la directora del Instituto Aragonés de la Mujer, Natalia Salvo, para condenar la violencia y hacer hincapié en que erradicarla es una tarea de todos. Lo hizo tras la concentración a las puertas de la DGA, donde incidió en que se trata del "problema social más grave" que tiene la democracia española, por lo que urgió a combatirlo unidos. "No hay mayor vulneración de los derechos humanos que la violencia contra las mujeres", añadió.

En la misma línea se pronunció el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, quien valoró que hace falta una "gran respuesta nacional" para lograr erradicar este problema que, a su juicio, requiere de un cambio cultural. Santisteve declaró 24 horas de luto oficial y estuvo al frente de la representación de ediles y trabajadores que se reunió para guardar un minuto de silencio a las puertas del Ayuntamiento.

El Justicia también se concentró en su institución para condenar el asesinato, al igual que hicieron los parlamentarios y diputados de las Cortes de Aragón. Su presidenta, Violeta Barba, lamentó el asesinato de la vecina de Zaragoza y que su hija de nueve años se quede huérfana. La dirigente podemista reclamó "educación en igualdad y fondos económicos" para evitar que se vuelvan a repetir estos hechos.

La Delegación del Gobierno bajó las banderas a media asta en señal de duelo y se unió también a las concentraciones en repulsa por este crimen machista, el primero en Aragón y el decimoséptimo en España en 2018. "Vamos a trabajar sin descanso, no podemos permitir como sociedad que maten, que sigan asesinando mujeres como lo están haciendo", dijo Carmen Sánchez con la voz entrecortada por la emoción.

Coordinación y financiación

En su primera comparecencia tras prometer el cargo de delegada el pasado jueves, Sánchez recordó que la lucha contra la violencia de género iba a ser una de sus prioridades al frente de la Delegación. Y su primera decisión se plasmará en la convocatoria esta misma semana de una comisión con todas las administraciones y cuerpos policiales implicados en la lucha contra la violencia de género.

Además, adelantó que se iba a poner en contacto con el Gobierno para urgir el cumplimiento del pacto de Estado, dotado con 200 millones de euros. "Vamos a exigir que se ponga ya en marcha para poder mejorar en coordinación, sensibilización y protección", aseguró.

Los partidos también trasladaron su condena pública. Así lo hizo el presidente del PP-Aragón, Luis María Beamonte, quien deseó que ninguna mujer tenga que vivir "amenazada y con miedo". Su homólogo del PAR, Arturo Aliaga, se adhirió a la delegada del Gobierno a la hora de reclamar que se aplique ya el pacto de Estado y, especialmente, la reforma legislativa para que los hijos de las víctimas puedan cobrar una pensión. Yla portavoz de Ciudadanos, Susana Gaspar, instó a que no haya "divisiones" en esta materia.

Mientras, CHA abogó por destinar los fondos necesarios para atajar cualquier tipo de violencia machista y el coordinador de IU-Aragón, Álvaro Sanz, por aplicar "políticas feministas integrales y estructurales". Igualmente, se sumó Comisiones Obreras, que reclamó medidas urgentes.