El Plan de Vivienda invertirá 72 millones y construirá 308 para alquiler social

El Gobierno de Zaragoza ha aprobado el Plan de Inversiones de Zaragoza Vivienda para 2018-2023, que persigue luchar contra el cambio climático y favorecer el acceso a la vivienda, con un presupuesto de 72,2 millones de euros con los que se construirán 308 viviendas de alquiler social.

Además se rehabilitarán energéticamente 842 inmuebles del parque público y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) ya ha mostrado su interés en financiar hasta el 50 por ciento hasta un límite máximo de 80 millones de euros.

El plan se llevará al Pleno municipal en el momento en el que se confirmen las condiciones que el banco ofrece para su financiación, según han explicado en la presentación del mismo el alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, y el concejal de Vivienda, Pablo Híjar, junto al gerente de Zaragoza Vivienda, Nardo Torguet.

También han estado en la presentación de este plan, que supondrá la mayor inversión pública en la capital aragonesa en los últimos diez años, el director de Recursos Operativos y Financieros, Juan José Lallana, y la jefa de Proyectos y Obras, Pilar López.

La negociación con el BEI, que se estima será en unas condiciones financieras muy favorables, se encuentra muy avanzada aunque sus responsables han apuntado que será entrado el otoño cuando se podrán conocer todos los detalles y se llevará al Pleno para su aprobación.

La estimación del Gobierno municipal es que se creen más de 1.300 puestos de trabajo, en lo que han calificado como unos cálculos "muy conservadores" de 19 puestos por cada millón de inversión, así como que se produzca una importante reducción de emisión de gases contaminantes, que serían equivalentes al CO2 que absorberían 164.000 árboles en un año.

También han incidido en que se trata de la mayor inversión en vivienda pública de los últimos 25-30 años, ya que este último plan han databa de finales de los años 80 del pasado siglo.

Santisteve ha explicado que este plan ha sido seleccionado por el BEI, que ya ha financiado proyectos similares en Barcelona y en la Comunidad Foral de Navarra, aunque en el caso de Zaragoza va más allá porque se amplía con el programa de rehabilitación energética con el que se intenta revertir los efectos del cambio climático y cumplir las nuevas políticas europeas en cuestión de construcción.

"Se hace lo que reclama Europa que hay que hacer", ha incidido Santisteve, quien también ha recordado que desde 2013 se está tratando de fomentar  el alquiler y la rehabilitación de la vivienda.

Para el primer edil, se trata de un proyecto "puntero" que va a proyectar a la ciudad tanto hacia Europa como hacia España y que se centra en el "cambio climático".

Por su parte, Juan José Lallana ha apuntado que este plan se afronta en este momento porque es "cuando la situación económica lo permite" con un grado de endeudamiento por parte de Zaragoza Vivienda para "acometer estos proyectos".

En cuanto a las aportaciones al proyecto, ha señalado que el BEI financiará el 50 por ciento con unos 36 millones de euros; el Ayuntamiento de Zaragoza el 39 por ciento con unos 28 millones; y el resto se obtendría de diferentes captaciones financieras, como 5,3 millones que ya se están invirtiendo en un proyecto en el barrio de Las Fuentes, 1,1 millones de Zaragoza Vivienda y 0,8 millones de otros programas europeos.

Lallana ha calificado este plan como "viable" tanto en la parte de obra nueva como en la de rehabilitación y ha dicho que a partir de 2023, cuando comenzará el plan de explotación del proyecto, el retorno se producirá en "grados aceptables".

De hecho, ha añadido que van a tratar de que alguno de los proyectos parciales que conforman la totalidad del plan puedan ser incluidos en otros proyectos europeos para lograr incrementar la financiación.

Además de la reducción de emisiones de gases contaminantes, también han apuntado que con la implantación de este plan se producirá un ahorro anual en la demanda de calefacción de unos 652.000 euros y de unos 29.000 euros en la de aire acondicionado. En este caso será mucho menor porque se trata de una instalación que no incluye Zaragoza Vivienda en las casas que oferta.

Por su parte, Pablo Híjar ha destacado la complejidad del plan que se va a acometer porque se va a llevar  a cabo en viviendas que seguirán estando ocupadas con personas viviendo en ellas.

También ha apuntado que los criterios que van a cumplir estas viviendas tan solo hay una construcción privada en la ciudad de Zaragoza que los cumpla y "otra que está en construcción".

El concejal de Vivienda ha subrayado que "no tiene sentido llevar el proyecto al Pleno en junio" hasta que el BEI no detalle las condiciones "exactas" del préstamo, a la vez que espera que cuente con el respaldo mayoritario de los grupos políticos del consistorio porque, ha considerado, que la vivienda "debería sacarse del marco de las hostilidades" que se están viviendo en el día a día municipal.

Nardo Torguet, por su parte, ha señalado que tras el plan presentado este jueves "hay meses de trabajo con un largo recorrido", a la vez que ha señalado que para la próxima semana está prevista la primera visita técnica de miembros del BEI para conocer in situ el proyecto.