Donde duermen los gigantes y cabezudos
Calatayud inauguró este sábado por la mañana un espacio en el que están expuestos casi todos los integrantes de la comparsa local y que será sede de actividades.
Los reyes moros, el baturro, la bruja, Popeye, el lobo o el diablo se rodearon este sábado de decenas de niños, pero en un entorno totalmente diferente al habitual. Calatayud cuenta desde este sábado con la Casa de los Cabezudos, un espacio expositivo de unos 100 metros cuadrados en la primera planta del Edificio Claretianos donde se puede contemplar parte de la comparsa de gigantes, enanos y cabezudos.
"Es un museo que tiene vida, porque todos no caben a la vez. Quitaremos alguno de los expuestos y sacaremos otros", explicaba Javier Gracia, presidente del Grupo Cultural AJB, entidad impulsora del proyecto junto al Ayuntamiento. En este sentido, el concejal de Cultura, José Manuel Gimeno, dijo que esta sede va a servir como centro de interpretación de la comparsa, un grupo "que tiene mucha tradición y arraigo en la ciudad". Para Javier Villa, miembro de AJB y una de las personas más vinculadas al proyecto, la jornada era muy especial: "Es un proyecto en el que llevamos trabajando mucho tiempo".
Entre los asistentes más pequeños estaba Miguel, enfundado en el disfraz de payaso. Su madre, Melania Recaj, reconocía que le había gustado mucho. "Yo no les tengo miedo y les canto por la calle", dijo Paula Magallanes, de tres años. Según su padre, Diego, los preferidos para ella son el payaso y el lobo. Para la pequeña Alba Mallans, los mejores son la bruja y el payaso. Su madre, Natalia Pérez, confesaba: "Tenemos que ir a todos los actos y ya está pidiendo uno para Navidad". También acudió Esther Blas, acompañada de sus hijas.
