El poder asociativo del Actur se deja notar en los presupuestos participativos

El distrito del Actur es uno de los que concentra más asociaciones vecinales de Zaragoza. Su movimiento para hacer oír las reivindicaciones que preocupan a los residentes de la zona es constante, pero gracias a la creación de los presupuestos participativos ha aumentado. El colectivo Actur-Rey Fernando es el que tiene mayor número de socios en activo; roza los 500 y entre todos han conseguido que una de sus peticiones sea la segunda más respaldada de toda la ciudad esta edición.

“El año pasado fuimos la asociación vecinal que más propuestas hizo en los presupuestos y en esta ocasión nuestra implicación ha sido similar”, dice el presidente, Emilio Rodríguez. Para el colectivo, se trata de “una gran oportunidad” en la que volver a sacar a la luz aquellas propuestas que lleva peleando en las comisiones durante años “y por las que no nos han hecho ni caso”. La asociación se ha esforzado para recopilar las carencias más destacadas del barrio, pero también ha invitado a los residentes en el Actur a presentar sus reivindicaciones a título personal.

Este año se podían hacer propuestas de distrito y otras a nivel de ciudad. En el cómputo global, una de las presentadas por el colectivo Actur-Rey Fernando ha sido la segunda más votada con 383 apoyos, solo por detrás de la creación de un espacio de conservación y exposición de pasos de Semana Santa. “Solo podíamos participar en la votación de nuestra propuesta los censados en nuestro distrito, así que estamos muy satisfechos con la implicación”, señala Rodríguez. Se trata de permitir un giro a la izquierda en la salida de la calle de Emilia Pardo Bazán, algo muy solicitado por los que circulan por la zona.

La vía tiene una salida obligatoria a la derecha en su incorporación a la avenida de Ruiz Picasso, lo que supone que muchos vehículos tengan que desplazarse hasta la glorieta de Ángel Guinda para efectuar el giro a la izquierda. Desde la implantación del tranvía, “esta maniobra provoca la acumulación de tráfico en la glorieta y prolonga el tiempo de uso del vehículo, con la consiguiente contaminación”, explica el presidente de la asociación. En las inmediaciones de Pardo Bazán y Ruiz Picasso está el cuartel de la Policía Local, el centro logístico de la Cruz Roja y el centro de salud Amparo Poch, que tal y como apunta Rodríguez “realizan con frecuencia salidas de emergencia y por eso sus usuarios son potenciales defensores de esta propuesta, para permeabilizar la movilidad”.

El presidente recuerda que el año pasado ya lanzaron esta petición en los presupuestos y que fue desestimada “porque a un técnico no le pareció oportuna”. Desde entonces, los vecinos han establecido negociaciones con el Consistorio y confían en que este año “no nos la echen para atrás, porque hemos hablado con los responsables de Movilidad y les hemos puesto sobre la mesa la conveniencia de hacer esta actuación”. Además, la asociación vecinal destaca que la obra “a priori no es muy cara” y que se podría solucionar modificando la semaforización.

Por el momento, se han quedado fuera otras propuestas muy demandadas en el Actur, pero hasta el 13 de abril los vecinos van a poder priorizar diez peticiones en una sesión especial de la mesa de los presupuestos participativos. Entre ellas, avanza Rodríguez, destaca el acondicionamiento de solares, como el que se encuentra junto al IES Tiempos Modernos, para que cuente con vegetación y equipamientos para la práctica de deporte. Desde la asociación Actur-Rey Fernando también consideran importante que se instalen juegos adaptados a niños con discapacidad motora en las zonas infantiles de los parques del distrito.

El movimiento activo de la asociación Actur-Rey Fernando también se ha dejado notar con la recogida de recursos contra los recibos del Impuesto sobre la Contaminación de las Aguas (ICA). El colectivo se llegó a ver “desbordado”, ya que se ofreció desde un primer momento a ayudar, pero sus medios eran limitados y “no teníamos la capacidad para organizar algo de tal calado”, lamenta el presidente. Aun así, consiguió presentar más de 2.000 recursos y está satisfecho por poder demostrar que “con implicación las movilizaciones se consiguen”.

Rodríguez subraya que “la asociación vecinal está más viva que nunca”, pero para mantener su actividad es necesario que se produzca un relevo “que dé frescura a nuestras intervenciones y actuaciones”, por eso invita a todos los vecinos a participar “en la medida de sus posibilidades”. Esa es para Rodríguez la única manera de que el barrio se mantenga “activo y reivindicativo”.