Un lustro de la línea 1 del tranvía: menos tráfico, 160 millones de usos y una huelga por resolver

La ruta entre Valdespartera y Parque Goya ha reducido los atascos en sus 5 años de vida, pero las fallidas previsiones de viajeros obligan a indemnizar a la empresa.

El trazado completo de la línea 1 cumple cinco años
El trazado completo de la línea 1 cumple cinco años
Oliver Duch

La línea 1 del tranvía de Zaragoza cumple cinco años del estreno de su trazado completo, el que une los barrios de Valdespartera y Parque Goya. Lo hace con cifras de récord y como uno de los transportes públicos más elogiados del país, pero con varias manchas en su expediente, como las erróneas previsiones de viajeros que obligan a indemnizar cada año a la empresa, o una huelga laboral que inicia este lunes su tercera semana de paros parciales.

Pese a que la capital aragonesa recuperó la circulación de tranvías en 2011 –tras su desaparición en 1976–, no fue hasta la primavera de 2013, hace ahora justo un lustro, cuando el servicio arrancó en su totalidad. Los responsables políticos (gobernaba el PSOE) y técnicos de aquella época defendieron que a partir de ese momento se verían las virtudes del nuevo medio de transporte de gran capacidad de la ciudad. Comenzaron entonces a surcar las vías la flota completa de 21 tranvías Urbos, fabricados por la CAF en Zaragoza, en un trazado de 25 paradas y sin la ‘competencia’ del bus, que fue reordenado para no coincidir en su trayecto y garantizar su uso.

Desde entonces, el tranvía de Zaragoza se ha convertido en el que más pasajeros transporta del país, hasta llegar a los 160 millones de usos. De lunes a viernes se superan los 100.000 diarios y solo en 2017 fueron 28,2 millones. Cada año las cifras crecen, pero no lo suficiente para alcanzar las –fallidas– previsiones que se hicieron en el pliego de condiciones. Por ello, el Ayuntamiento debe indemnizar a la empresa concesionaria: en 2014 hubo que pagar unos casi simbólicos 1.040 euros; en 2015, la factura subió a 138.355; en 2016, fueron 314.401; y el año pasado, 420.000.

En este tiempo los convoyes han recorrido 7,5 millones de kilómetros y han realizado 403.435 viajes de ida y vuelta por la línea 1, que ha recibido la visita de representantes de 229 ciudades de 63 países interesados en su funcionamiento o, por ejemplo, en las mejoras medioambientales que han traído a la ciudad. Según detallan desde la Sociedad de Economía Mixta (SEM) de Los Tranvías de Zaragoza, «se han creado 73.275 metros cuadrados de zona verde y se han plantado 1.135 árboles». Sus registros reflejan una reducción de 293 toneladas de CO2 y un ahorro anual de 19,6 millones de litros de combustible. Estos y otros motivos les han llevado a recibir 13 premios nacionales e internacionales.

Con la llegada del tranvía, además, se ha reducido un 15% el tráfico en el conjunto de la capital aragonesa, un dato que llega al 32% en la zona Centro. Era uno de sus objetivos, limitar el espacio del vehículo privado en favor del transporte público. Por contra, tanto el Consistorio como la empresa han tenido que lidiar con la lacra de los atropellos. Cinco de ellos han sido mortales y se ha dado la circunstancia de que cuatro se han registrado en los últimos meses, lo que ha obligado a retomar campañas de seguridad y concienciación.

Asamblea de los conductores

En cuanto al conflicto laboral que mantienen los conductores con la operadora del tranvía, este lunes comienza la tercera y, en principio, última semana de paros parciales. Inicialmente estaba convocada hasta el sábado 7 de abril, pero hoy se reúne la asamblea de trabajadores para analizar la propuesta de descansos que ha hecho la empresa y, en su caso, convocar un referéndum para decidir si se prolongan o no las protestas. De cualquier manera, los paros volverán este martes (de 8.00 a 10.00 y de 19.00 a 21.00) en el servicio.

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