Sillas en la parada del tranvía de la avenida de la Academia ante la falta de bancos

Los vecinos de Parque Goya han instalado sillas en las paradas del tranvía ante la falta de bancos para que los usuarios de este medio de transporte de alta capacidad puedan sentarse bajo las marquesinas a la espera del convoy.

Desde que el 26 de marzo de 2013 se pusiera en marcha este medio de transporte muchos vecinos se dieron cuenta de que la parada de la Academia no contaba con bancos. La asociación de vecinos Parque Goya solicitó al Ayuntamiento que dotara de lugares de asiento y resguardo a los viajeros en esta parada, como en el resto de paradas.

"En respuesta a nuestra solicitud los argumentos para justificar esta carencia fueron claros: el andén no disponía de la anchura suficiente, y al tener servicio por ambos lados la colocación de mamparas para la protección ante viento impedía la permeabilidad", han relatado desde la asociación vecinal.

Este último argumento les parece razonable, ya que se cumple en todas las paradas de este tipo a lo largo de la línea, pero respecto a los bancos han asegurado que la anchura es suficiente, "incluso ligeramente superior a la parada de plaza España, donde hay dos bancos en los extremos", han recordado.

Otro argumento de justificación es que en la parada final de línea siempre hay un tranvía, con lo que la espera se puede realizar dentro del mismo. "Pero el caso es que no se ajusta a la realidad, ya que cuando la frecuencia de paso es alta, es habitual encontrar los andenes vacíos y la gente esperando. E incluso en horas puntas también hay momentos en que no hay tranvía", han explicado desde la asociación.

Tras las quejas reiteradas sobre este asunto se colocó un banco, pero a 30 metros de la marquesina, alejado del lugar de parada de los convoyes, y a la intemperie. "Un banco inútil, que se instaló con el claro objetivo de acallar las voces de los vecinos de Parque Goya demandando un pequeña mejora que no pensamos que suponga un gasto excesivo", han lamentado.

Tras esta exposición han confiado en no tener que llegar a hacer como los vecinos de Montañana, que han dotado a sus paradas de autobús de mobiliario elaborado por ellos mismos, a la espera de una marquesina en condiciones.