Un joven zaragozano de 28 años muere al despeñarse con su quad en un barranco de Paniza

La familia de la persona fallecida comenzó a extrañarse porque no regresaba al domicilio, por lo que se pusieron en marcha las labores de búsqueda.

El grupo de vecinos de Paniza que participó ayer en la Ofrenda llevó el estandarte con un crespón negro en memoria del fallecido.
El grupo de vecinos de Paniza que participó ayer en la Ofrenda llevó el estandarte con un crespón negro en memoria del fallecido.

Carlos Comín, un joven zaragozano de 28 años, perdió la vida el jueves al sufrir un accidente con el quad que conducía en el camino rural del Barranco de las Tejerías de Paniza. Al parecer, y según informaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil en Zaragoza, el vehículo se salió de la vía, por causas que se desconocen, por el margen derecho y se despeñó por un desnivel existente en esta zona. Una patrulla localizó su cuerpo a las 0.42 del viernes, una vez que su familia había dado la voz de alarma al extrañarse porque no regresaba a casa.

Algunos vecinos de esta población de la comarca de Campo de Cariñena vieron al joven salir por la mañana con el quad de la casa que su familia posee en la localidad desde hace tiempo. Solía pilotar este vehículo deportivo desde hace algo más de año y medio. Su intención era volver a comer con los suyos. Por eso, sobre las cuatro de la tarde sus allegados se preocuparon al no tener noticias de él y empezaron a intentar localizarlo junto a algunos amigos del joven que se sumaron a la búsqueda por los sitios donde suponían podría haber ido.

También se dio aviso a la Guardia Civil, que montó un dispositivo. Dos amigos de la víctima que participaban en el despliegue fueron los primeros en localizar el vehículo y su cuerpo, ya de madrugada, cuando circulaban en coche por el camino rural donde se produjo el luctuoso hecho. Vieron las marcas de unas ruedas sobre la vegetación de la zona y al acercarse al lugar la luz de las linternas que llevaban reflejó en la matrícula blanca del quad.

El lugar donde se produjo el siniestro, el Barranco de las Tejerías, es una zona de carrasca y pinos situada a unos cuatro kilómetros de Paniza. Por él suelen transitar senderistas y también ciclistas de BTT.

La muerte del joven ha causado una gran conmoción en Paniza. El alcalde, José Manuel Cebrián, explicó que era "muy conocido y apreciado, ya que, aunque no era natural del pueblo, ha venido desde que era niño y tiene familia aquí". Las banderas del Ayuntamiento ondean a media asta y con crespón negro en su memoria. El grupo de vecinos que participó en la Ofrenda de Flores a la Virgen del Pilar también llevó uno en su estandarte. Comín era también muy aficionado a las vaquillas, por lo que le apodaban Manolete. Por eso, en el concurso goyesco de recortes, celebrado por la mañana en la plaza de la Misericordia de Zaragoza, se le rindió un recuerdo por megafonía.

El funeral se celebrará este domingo en el cementerio de Torrero. Después será incinerado.

La tragedia se ha cebado en esta familia. Su tío, Enrique Comín, muy vinculado a Paniza porque su mujer era de allí, murió atropellado por un conductor cuando iba en bicicleta por la N-330, a la altura de Botorrita.

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