Cristinel Ionel Surca, el hombre que asesinó a su exmujer el pasado domingo y luego se autolesionó, sigue ingresado en la unidad de cuidados intensivos del Hospital Miguel Servet en estado grave. El agresor permanece custodiado por la Policía, que no ha podido tomarle todavía declaración. El arrestado, tras acuchillar a Alexandra Rodica, de 28 años, en presencia del hijo de ambos, de 5, se clavó el arma en la cabeza. Fuentes cercanas al detenido aseguraron que es probable que le queden secuelas cerebrales, aunque los médicos no han querido aventurar un pronóstico.

Cristinel Ionel, de 32 años, agredió a la mujer cuando esta llegaba al punto de encuentro familiar, en Conde de Aranda, al que se dirigía para darle al niño, en cumplimiento del régimen de visitas impuesto por el juez en el procedimiento de divorcio que estaban tramitando. A pesar de que las normas del centro establecen que los cónyuges deben llegar con una separación horaria determinada y que Ionel tenía una orden de alejamiento de su expareja, la quebrantó y comenzó a hablar con ella. El agresor tenía que ser juzgado al día siguiente por un delito de coacciones en el Juzgado de lo Penal número 9 y había estado horas antes con su abogada, Olga Oseira, preparando el mismo "con normalidad", según la letrada. Sin embargo, el domingo fue al encuentro de su exmujer y muy probablemente la abordó para tratar de influir en la declaración que Alexandra tenía que prestar.

Dispuesto como estaba para agredirla si no respondía a sus deseos, de repente sacó un cuchillo y se lo clavó en el abdomen y en el cuello. La joven sufrió lesiones tan graves que murió horas después en el hospital. Mientras, él no consiguió arrebatarse a sí mismo la vida y sigue hospitalizado.

La primera vez que Alexandra Rodica denunció a su marido por lesiones este fue absuelto, lo que supuso también que se le retirara la orden de protección. Tras esta circunstancia, siguió viviendo en una casa de acogida para mujeres maltratadas del Ayuntamiento. Sin embargo, pronto empezó a encontrárselo por la calle más de lo deseable. De hecho, a pesar de ser un lugar secreto por seguridad, en octubre de 2015 Ionel se presentó en la misma puerta de la casa de acogida con un ramo de flores.

Este hecho fue denunciado por la joven, animada por su letrada, Carmen Romeo. El asunto siguió adelante y el juez de violencia número 2, José Luis Martínez, le concedió una nueva orden de protección y citó al hombre para tomarle declaración. Ionel justificó su presencia cerca de la casa de acogida en su deseo de ver a su hijo. Pero cuando el magistrado le preguntó por las flores, se negó a declarar y, al final, se le abrió un juicio por coacciones que debería haberse celebrado el día que murió Alexandra.

Otro detenido por violencia

Las disputas por los hijos son frecuentes entre las parejas separadas y, ayer mismo, la Policía Local detuvo en Las Fuentes a F. A. V., de 30 años, por agredir a su exmujer. Los hechos se produjeron a las 0.10 en la calle de Almonacid de la Sierra, tras una discusión en el momento de la entrega de sus hijos menores.