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Andorra vibra con el toque de tambor de toda España en las Jornadas de Exaltación
La villa minera acoge el encuentro nacional de las 22 localidades del Consorcio, agrupación que engloba a municipios de Murcia, Valencia, Castellón, Córdoba, Albacete, Teruel y Zaragoza.
Miles de personas provenientes de los 22 municipios del Consorcio Nacional de los Pueblos del Tambor y el Bombo invaden durante todo este fin de semana las calles de Andorra en la edición número 37 de las Jornadas de Exaltación que vuelven este año a Aragón después de celebrarse el año pasado en Tobarra, en Albacete. La gala inaugural del viernes ya sirvió para calentar motores para una jornada, la de este sábado, multitudinaria y festiva, a la que finalmente respeta el temporal para lucimiento de los tambores y los bombos de toda España.
Son estas Jornadas punto de encuentro de grupos de tambores y bombos procedentes de localidades que engloban entre todas cerca de 250.000 habitantes; las villas tradicionales del Bajo Aragón histórico se ven acompañadas por la propia capital de provincia, junto a cabeceras zaragozanas importantes como Fuentes de Ebro y Alagón. Junto a ellas, representantes de importantes núcleos del Levante y Murcia, como Alzira, Alcora, Mula y Jumilla, y ciudades de tradición en Albacete y Córdoba: Hellín, Tobarra y Baena.
Todo ello llena las calles de la villa minera en el encuentro de este año. "Este fin de semana no sólo somos ruido. Somos fuerza, somos cultura y somos amigos", expresa el alcalde andorrano, Rafael Guía, "en un encuentro fraternal en torno a un acontecimiento declarado por la Unesco Patrimonio Inmaterial de la Humanidad". Por eso la agenda de actividades de las Jornadas de Exaltación se extiende tres días; el sábado es el plato fuerte, pero su discurrir no se entiende sin el toque de medianoche que invadirá toda esta madrugada del domingo hasta la clausura del evento.
Hasta entonces, las calles de Andorra son un hervidero de tocadores de toda España en absoluta concordia. "Son unas jornadas extraordinarias, como Andorra se merece", expresa el presidente del Consorcio, Antonio Mesa. Afronta el portavoz sus días finales al frente de la agrupación, pues las Jornadas de este fin de semana están sirviendo también para que se renueve su junta directiva. Deja el trabajo hecho, al menos en lo que se refiere al futuro de las Jornadas. Tras Andorra, el turno será para Moratalla, en Murcia. En 2026 volverán a Aragón, a La Puebla de Híjar, para viajar después a Albalate del Arzobispo, Hellín y Valderrobres.
"El buen hacer de los pueblos en la organización de estas jornadas augura un gran futuro", confiesa Mesa. Y esa organización toma forma en el espectáculo central que este sábado se ha celebrado en el polideportivo de Andorra, con miles de personas abarrotando el toque y redoble de cada uno de los 22 grupos participantes. El cierre de Andorra, en reivindicación de la rompida de hora como elemento fundamental de la Semana Santa, emocionó a un auditorio que ha disfrutado también del desfile de esta tarde.
La villa minera se sumerge en la larga madrugada del toque libre, la gran fiesta de este encuentro nacional. Se duerme poco en las Jornadas de Exaltación, el preludio festivo y cultural de la inminente Semana Santa. A cambio, se genera el ambiente propicio para que perdure una de las principales tradiciones culturales de España, que es lo mismo que decir uno de sus principales atractivos turísticos y patrimoniales. "Son jornadas para el disfrute de todos, que muestran la identidad del pueblo de Andorra", finaliza Rafael Guía: "y para expandir nuestro sentimiento por todos los rincones del país".
