Decepción por la renuncia de la multinacional cárnica Tönnies a invertir 100 millones en Calamocha

La noticia de la renuncia de Tönnies a construir en Calamocha un macromatadero con una inversión de 100 millones de euros y la generación de 1.600 empleos directos ha causado decepción en Teruel, que ve como se evapora una inversión multimillonaria. La empresa comunicó que abandona el proyecto a la Consejería de Fomento hace pocos días, aunque una fuente de este departamento ha señalado que los responsables de Tönnies sostienen que a finales de 2022 ya habían comunicado su decisión tanto al Ayuntamiento como al anterior Ejecutivo autonómico, un extremo que desmienten fuentes municipales.

La primer teniente de alcalde de Calamocha, Sonia Palacio, afirma que el Ayuntamiento no tuvo constancia de la renuncia de Tönnies hasta el pasado lunes, cuando el presidente de la Sociedad para el Desarrollo de Calamocha S. A. (Sodecasa), el consejero de Fomento, Octavio López, les comunicó que la empresa alemana cancelaba el proyecto cárnico.

Palacio niega que el Consistorio hubiera recibido una carta a finales de 2022 en la que Tönnies anunciaba que abandonaba. La teniente de alcalde afirma que en su comunicación escrita la compañía cárnica pedía una modificación de las condiciones de compra del suelo o amenazaba con olvidarse del proyecto, pero sin llegar a concretar este extremo.

La concejala agrega que, posteriormente a la carta pidiendo mejores condiciones de adquisición del suelo, la empresa ratificó su personación en el procedimiento judicial contencioso-administrativo contra la autorización ambiental del proyecto iniciado por el recurso de la empresa Quality Pharma, de Tomelloso (Ciudad Real).

Palacio admite que la evaporación del proyecto del gran matadero supone una “decepción” para el Ayuntamiento, porque desaparece un proyecto “en el que han trabajado mucho, tanto los técnicos municipales como el equipo de gobierno”.

La teniente de alcalde considera, no obstante, “contradictorio” que Tönnies comunique que desiste de instalarse en Calamocha, pero siga personada como parte afectada en el contencioso-administrativo que se sigue en el Tribunal Superior de Aragón con los costes legales que conlleva.

Sonia Palacio achaca buena parte de la culpa del fracaso del proyecto del matadero al tropiezo judicial de la autorización ambiental, aunque apunta también como posibles causas la actual situación política de Europa derivada de la guerra entre Ucrania y Rusia. Agrega que la empresa cárnica quería, para seguir adelante, una "seguridad jurídica" que estaba en entredicho con el recurso ante el Tribunal Superior de Aragón.

Palacio señala que la urbanización del polígono donde se iba a instalar Tönnies sigue adelante y habrá otras empresas interesadas en implantarse en Calamocha.

También el presidente de la Diputación Provincial de Teruel (DPT), el popular Joaquín Juste, ha manifestado su decepción por la renuncia de la empresa cárnica alemana porque su instalación “hubiera supuesto un impulso económico extraordinario para la comarca del Jiloca, que lo necesita”. En su opinión, el matadero era una industria “imprescindible” para una comarca a la que “le falta actividad”.

A continuación, Juste ha dirigido sus dardos contra el Ayuntamiento de Calamocha, porque, aunque “era conocedor de la renuncia desde hace tiempo, no informó”. A su juicio, ha faltado “transparencia” municipal en este asunto. Para el presidente de la DPT, el equipo de gobierno calamochino, del PSOE, “omitió” la información sobre la desestimación del proyecto porque “pensaba que le iba a perjudicar en la campaña electoral”.