La Audiencia Provincial de Teruel condena a un joven vecino de Calamocha, C. O. G., de 22 años de edad, a tres años de prisión por un delito contra la salud pública o de tráfico de drogas, tras haber sido sorprendido por la Guardia Civil con medio kilo de cocaína oculto en su zona inguinal.

Los hechos ocurrieron el 1 de febrero de este año, cuando C. O. G. salió de su casa de Calamocha y subió a un turismo con otras dos personas. La Guardia Civil, que realizaba un seguimiento del procesado, fue detrás de ellos con su vehículo y en una rotonda a la altura de Monreal del Campo, concretamente en el punto kilométrico 176 de la Nacional 234 (Sagunto-Burgos), los detuvo, haciendo salir del coche al copiloto, que iba cargado con la droga. Al cachearlo, descubrieron el medio kilo de cocaína adherido a la ingle.

El juicio por aquel suceso iba a celebrarse este miércoles en la Audiencia Provincial de Teruel, pero, previamente al inicio de la sesión, el abogado del acusado, Juan Carlos Macarrón, y el fiscal encargado del caso, a la vista de que C. O. G. ha reconocido los hechos, han alcanzado un acuerdo por el que el investigado será condenado a tres años de prisión.

La Fiscalía de Teruel pedía en principio cuatro años de cárcel, pero este miércoles ha estimado la atenuante de drogadicción del procesado y ha modificado su escrito de calificación rebajando en un año la petición de prisión para C. O. G. 

A través de su abogado, el joven ha solicitado la suspensión de la pena para poder someterse a un tratamiento de desintoxicación y siempre con la condición de que no vuelva a delinquir en el plazo de cinco años. La Audiencia resolverá sobre esta petición en los próximos días.