Aguatón, con 18 vecinos, construye una nave ovina para crear empleo y ganar población
El aprisco, que se ofrecerá a los ganaderos a bajo alquiler, ha costado 170.000 euros y mide 800 metros cuadrados.
El Ayuntamiento de Aguatón ha decidido aprovechar los recursos del municipio para crear empleo y ganar población, pues en la localidad solo viven ahora de forma fija 18 personas repartidas en tres viviendas. Con esta premisa, el Consistorio acaba de construir una nave para guardar ovejas que ofrecerá a un alquiler muy bajo a aquel ganadero emprendedor que decida coger las riendas de un rebaño y quedarse a vivir en el pueblo.
Como explica el alcalde de Aguatón, Juan Ramón Cardó, en la localidad hubo siempre ganaderos de ovino, hasta que hace cuatro años este oficio desapareció por completo del pueblo. "Creemos que podemos dar empleo a una o dos personas, intentando que el municipio crezca en población, porque, sin puestos de trabajo, es muy difícil que alguien quiera venir", dice el regidor.
Previamente a la construcción de la nave, se han unificado en un mismo arrendamiento todos los pastos de Aguatón, que suman más de 2.000 hectáreas de terreno y que podrán ser utilizadas por el ganadero que asuma la explotación de la infraestructura. La medida tiene un doble objetivo, pues, además de atraer población, ayudará a mantener limpios de maleza los montes del municipio al comerse la hierba las ovejas. «Sin rebaños, el paisaje se hace salvaje y vienen otros problemas», explica Cardó.
La nave, de 800 metros cuadrados y dotada de agua y posibilidad de conexión a la red eléctrica, tiene capacidad para 1.200 ovejas y ha costado 170.000 euros. La mayor parte de esta cuantía, 120.000 euros, ha venido del Fondo de Inversiones de Teruel, el Fite, mientras que el resto son recursos propios del Ayuntamiento.
Aguatón lleva tiempo resistiendo contra la despoblación. No tiene colegio por falta de niños ni tampoco comercio. El bar funciona mediante autoservicio, pues son los vecinos quienes cogen las bebidas y pagan, organizándose por turnos para proveer de reservas el local. El pueblo se transforma en verano con el regreso de antiguos vecinos.
