Cinco meses después de entrar en servicio el nuevo contrato para el transporte sanitario de urgencias, las guardias presenciales del personal destinado a las ambulancias de soporte vital básico (SVB) –con unas prestaciones inferiores a las UME y UCI móviles pero capaces de ofrecer asistencia médica en ruta– siguen sin arrancar en la provincia de Teruel, salvo en el caso de Cantavieja, donde se llevan a cabo en un local contiguo al centro de salud. Las SVB de Alcañiz, Andorra y Utrillas continúan sin personal de guardia en los centros de salud y el conductor y el técnico sanitario adscritos hacen las guardias localizadas y son llamados en caso de una emergencia.

El Sindicato Cooperación Sindical (SCS) denuncia que esta situación retrasa la respuesta en caso de tener que atender una urgencia. Según esta organización profesional, las guardias presenciales no se han puesto en marcha en las bases de ambulancias  SVB por falta de un espacio físico adecuado. La estancia del personal prevista en los centros de salud y hospitales oscila entre 7 y 12 horas diarias durante todo el año.

El responsable de transporte sanitario de SCS, Juan Antonio Busqueta, explicó que, dada la pasividad en la adecuación de locales para el personal de las SVB y también para los propios vehículos, es "prácticamente imposible" que todas las bases estén operativas antes de acabar el mes de enero, tal y como se establece en las condiciones del contrato firmado entre la DGA y la empresa adjudicataria, Acciona.

El alcalde de Utrillas, Joaquín Moreno, afirmó que no disponer de guardias presenciales supone un "agravio" para los centros de salud afectados. Moreno recordó a la DGA que "la vertebración del territorio también incluye la ejecución de pequeñas inversiones, como las necesarias para adecuar el local al personal y las ambulancias de Soporte Vital Básico".

Al no haber arrancado las guardias presenciales, el personal está localizable en caso de necesidad, mientras que los vehículos permanecen aparcados junto a los centros sanitarios o, en ocasiones, en las cocheras o cerca de las casas de los conductores.

"El servicio empeora"

Busqueta señaló que la presencia de los operarios en los centros de salud garantizaría "una salida inmediata" en caso de necesidad, mientras que tener que llamar a un conductor y a un técnico demora la respuesta y "empeora el servicio al ciudadano".

Desde la DGA señalan que el compromiso de poner en marcha las guardias presenciales se circunscribía "al mes de enero", lo que no significa desde el día 1. Las mismas fuentes oficiales añaden, no obstante, que desde el Salud se han dado instrucciones a Acciona para que el personal empiece a realizar las guardias junto a los vehículos "antes de 15 días". Busqueta, sin embargo, considera inviable cumplir este objetivo ante la falta de espacios adecuados en los establecimientos sanitarios.

La concejala de Sanidad de Andorra, Peña Martínez, se dirigió al Salud para conocer los motivos por los que no se han materializado las guardias presenciales en la SVB de la localidad. Martínez aclaró que el perjuicio para la calidad asistencial con las guardias localizadas es mínimo. Mientras que en Andorra la presencia del personal está planificada durante 7 horas al día, en Alcañiz, donde tampoco se ha puesto en marcha la medida, se alargará a 12.

La entrada en servicio del nuevo contrato empeora las prestaciones en los casos de Utrillas y Cantavieja, que pasan de tener 24 y 12 horas de guardia presencial a ninguna mientras no se apliquen las condiciones acordadas con Acciona el 1 de agosto de 2018.