El comité de empresa de la central térmica de Andorra (Teruel) ha expresado su "enérgico rechazo" al cierre de la planta que la dirección les ha comunicado este jueves mismo, y ha exigido que se realicen "las inversiones necesarias" en materia medioambiental que garanticen su continuidad.

Así han contestado por escrito a Endesa tras recibir este jueves en una reunión la noticia de que la empresa va a iniciar en las próximas semanas el trámite administrativo de cese de actividad ante el Ministerio para la Transición Ecológica.

"Seguimos insistiendo en que esta central sigue siendo rentable para los intereses de Endesa", recogen los trabajadores en ese escrito de respuesta.

Y piden también una "transición justa, verdadera y urgente" de la economía de la comarca, teniendo en cuenta además que llevan "muchos años" avisando de que "mientras no haya alternativas, la central tiene que seguir funcionando".

Exigen garantías también en la protección de los empleados y destacan precisamente que "gracias al esfuerzo de todos los trabajadores" de la comarca, la empresa ha llegado a ser una gran multinacional y líder en el sector eléctrico.

Y por ello critican que "quiera dejar tirados" a los empleados porque "algo de responsabilidad social tendrá que asumir con esta comarca y sus gentes".