Una cuarta parte de los médicos de Atención Primaria que trabajan en la provincia de Teruel podría jubilarse de aquí a 2020 al cumplir los 65 años, la edad fijada actualmente para retirarse de la profesión. En total, entre los centros de salud del sector sanitario de Teruel y de Alcañiz, el territorio turolense dispone ahora de 165 profesionales y 40 de ellos, el 24,2%, son los que alcanzarán la edad de jubilación en los próximos tres años y medio. La pérdida de facultativos podría ser todavía mayor si deciden pasar a la reserva aquellos que han cotizado a Muface, el organismo público que gestiona las prestaciones sociales de los funcionarios del Estado y con las cuales es posible pasar a la reserva al alcanzar los 60 años.

Los datos han sido aportados por los sindicatos médicos de Atención Primaria de Aragón, los cuales se muestran muy preocupados por la repercusión que la masiva jubilación de profesionales que se avecina pueda tener en la provincia de Teruel, donde resulta muy difícil cubrir las plazas que se quedan vacantes, sobre todo si estas se encuentran en centros de salud mal comunicados con Zaragoza.

"Es una barbaridad"

"Tal cifra de jubilaciones, en solo tres años y medio, es una barbaridad y va a ocasionar problemas muy serios, al menos, si queremos mantener los centros de salud y centros de atención continuada que tenemos ahora", afirmó el secretario general de Sindicatos Médicos de Atención Primaria en Aragón, Jesús Rodrigo. "También habrá jubilaciones en las otras dos provincias, pero allí no resulta tan complejo encontrar sustitutos", continuó.

El sector de Teruel, que atiende a media provincia aproximadamente, tiene 16 centros de salud con un total de 93 médicos. Solo en los 6 meses que quedan de 2017 cumplen los 65 años 6 profesionales mientras que otros 10 alcanzarán la edad a lo largo de 2018, dos en 2019 y 5 en 2020.

En el sector de Alcañiz –sin contar Caspe y Maella por pertenecer a la provincia de Zaragoza– hay 10 centros de salud con 72 profesionales de Atención Primaria. Uno de ellos llegará a la edad de jubilación en lo queda de año, otros 5 en 2018, 4 en 2019 y 7 en 2020.

"El ritmo de reposición de profesionales en la provincia no da para llenar esos huecos", alertó Rodrigo, quien explicó que este año, de forma atípica, se han formado en Teruel 6 médicos residentes con posibilidad de quedarse en el territorio, pero las previsiones para el año que viene son que solo se formen 3 y que todos se vayan a sus respectivos países, al ser extracomunitarios. "Ni aún quedándose todos sería suficiente para cubrir las vacantes que se van a producir; vamos a tener problemas gordísimos", subrayó el secretario sindical.

Los centros de salud que más dificultades tienen para encontrar sustitutos son los más alejados de Zaragoza, epicentro de la Comunidad Autónoma. "Báguena, Calamocha, Monreal o Cella, unidos por la autovía a la capital aragonesa, no suelen tener problemas, pero cuando empezamos a desviarnos hacia Santa Eulalia o Albarracín, todo es más complicado", explicó Jesús Rodrigo.

Aunque la provincia de Teruel pierde población, todavía hay ambulatorios que soportan presión asistencial, con médicos que tienen más de las 1.500 cartillas que recomienda el Gobierno aragonés. En el de Alcañiz, por ejemplo, 3 facultativos tienen a su cargo más de 1.800 pacientes y otros cuatro, más de 1.700 usuarios.

Los sindicatos médicos piden al Gobierno aragonés que prolongue hasta los 67 años la edad de jubilación para aquellos profesionales que lo deseen y que se incentiven, económica o profesionalmente, las plazas de difícil ocupación. Proponen también que se ofrezcan puestos de trabajo "más estables y apetecibles" a los médicos sustitutos.

Desde el Departamento de Sanidad de la DGA señalaron que la posibilidad de demorar hasta los 67 años la edad de jubilación en Atención Primaria –ya se hace con algunas especialidades deficitarias– "se está estudiando" y resaltaron que el consejero de Sanidad, Sebastián Celaya, es partidario de adoptar esta medida.