Alcaldes del medio rural rechazan recortes en las guardias de los conductores de ambulancia

Piden que se mejoren los servicios sanitarios para poder atraer vecinos a los pueblos pequeños.

Un sanitario junto a una ambulancia.
Un sanitario junto a una ambulancia.

Alcaldes de varios municipios de la provincia expresaron ayer su total rechazo a que el nuevo modelo de organización del transporte urgente sanitario que estudia el Gobierno aragonés suponga recortes en los servicios de ambulancia que se prestan en el medio rural turolense, una probabilidad de la que alertó ayer la Diputación Provincial de Teruel (DPT).

Según la DPT, cuatro de las seis ambulancias de Soporte Vital Básico (SVB) que operan en la provincia verán reducidas las horas de guardia presenciales de su conductor, quien pasará a estar más tiempo en su domicilio o en otro lugar en el que pueda ser localizado por teléfono para que active el servicio cuando se produzca una urgencia.

De acuerdo a los datos que posee la institución provincial, el chófer de la ambulancia de Cantavieja pasará de 12 a 8 horas presenciales; el de Mora de Rubielos, que ahora permanece en la base 12 horas, estará las 24 horas de forma localizable; en el caso de Utrillas se pasa de 24 a 8 horas presenciales y, por último, Albarracín se quedará, al igual que ahora, con 24 horas de guardia localizada. 

"Esto es dar un paso atrás"

"Me parece muy mal", protestó ayer el alcalde de Cantavieja, Ricardo Altabás, quien denunció que "un ahorro económico va a suponer más tiempo de demora en la respuesta a una emergencia". "Esto es dar un paso atrás en la sanidad del medio rural –continuó–. Así, no van a venir jóvenes a vivir a los pueblos".

El alcalde de Albarracín, Raúl Jiménez, reclamó que se mejoren las prestaciones en el medio rural de acuerdo a criterios de dispersión poblacional y no solo en cuanto a cifras de demanda. Criticó que para toda la Sierra de Albarracín solo hay dos ambulancias y una de ellas, la que está en Orihuela del Tremedal, viaja solo con el conductor y un botiquín "más básico que el que hay en cualquier casa particular". "No es lógico que una sola persona realice el traslado:_fallece el paciente y el chófer ni lo sabe, por no hablar de que él mismo tiene que poner las cadenas si nieva o que no hay nadie para echarle una mano si se va a la cuneta el vehículo", agregó.

El regidor de Mora de Rubielos, Hugo Arquímedes, se mostró también muy preocupado. "Desde Mora se atiende a muchos pueblos alejados y es necesario que haya guardias de presencia física; se trata de salvar vidas", destacó. A su juicio, la única fórmula para luchar contra la despoblación es ofrecer "ventajas" a quien viva en el medio rural. "Pero se está haciendo justo lo contrario", dijo.

La preocupación por la pérdida de prestaciones llevó ayer al pleno de la DPT a aprobar una declaración institucional –a petición del grupo del PAR– por la que se solicitará al Gobierno aragonés que no elimine ningún servicio presencial de ambulancias en el medio rural. El diputado socialista José Ramón Morro señaló, no obstante, que el Departamento de Sanidad tiene sobre la mesa una nueva propuesta para todo Aragón que fija de 8.00 a 15.00 y de lunes a domingo el plazo de presencia física en los centros de salud para los conductores de ambulancias, mientras que de 15.00 a 8.00 estos profesionales harán guardias localizadas. A juicio de Morro, este nuevo modelo, que aún ha de salir a licitación, supone una mejora respecto al anterior, pues incluye la permanencia de los chóferes en la base durante 7 horas los sábados y domingos.

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