La llegada de la borrasca Ciarán ha activado la alerta por "crecidas extraordinarias" en los ríos Gállego, Ara, Cinca y Aragón. En este último, las fuertes lluvias -más de 40 litros- han multiplicado por seis el caudal en apenas siete horas (de 12 a 76 metros cúbicos por segundo) y el nivel ha rozado los dos metros a la altura de Canfranc, que ha vivido momentos de tensión en la mañana de este jueves ya que "el río ha estado a punto de desbordarse".

Imágenes de la riada en Canfranc

Así lo ha asegurado el alcalde, Fernando Sánchez, quien no obstante se ha mostrado aliviado ya que sobre las 10.00 se ha alcanzado el pico máximo de caudal y desde la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) le han informado de que a partir de entonces iba a volver a descender. Hay que recordar que aguas arriba, Candanchú ha recogido en las últimas 24 horas más de 140 litros por metro cuadrado. 

"Ha parado de llover y están bajando ya los caudales, pero ha habido un rato esta mañana que hemos estado al borde de que se hubiera desbordado el río. No obstante, ahora mismo la situación parece ya controlada", ha afirmado aliviado. El alcalde ha estado vigilando junto a la Guardia Civil un par de zonas del pueblo donde había riesgo de que el río saltara y obligara incluso a cortar la carretera N-330, "pero al final no ha hecho falta".

Se prevé que esta noche regresen de nuevo las precipitaciones en forma de lluvia "pero como también va a nevar, no se espera tanta cantidad de agua en el río para que nos dé un poco de tregua", ha señalado confiado. Aun así, también se muestra expectante con la previsión de nuevas borrascas para los próximos días. "El susto de hoy ha pasado, pero nos quedan tres o cuatro jornadas de agua y de nieve, que puede ser un aliado", ha destacado.

Sánchez reconoce estar sorprendido porque en Canfranc han caído más de 600 litros por metro cuadrado en 20 días. "Es una barbaridad", ha resumido. Por suerte, de momento no han sufrido graves incidencias aunque están alerta por el riesgo de desprendimientos.

El aumento del caudal del río Aragón ha sorprendido a vecinos y visitantes. "Es increíble como baja", aseguraba José Balopen desde Canfranc Estación, que llegó el miércoles a esta localidad del valle del Aragón a pasar unos días aprovechando la festividad de Todos los Santos. "Habíamos consultado la meteorología, pero no pensábamos que iba a llover tanto, la verdad es que impresiona mucho tanto el agua como el ruido que hace". 

También ha estado es Canfranc Pueblo donde el río "daba un poco más de miedo, porque casi se desborda". Además de tanta lluvia "confiamos en ver nieve, porque parece ser que lo próximo será eso", decía desde el puente de la Estación, donde muchos se acercaban a grabar con sus móviles y captar las imágenes del enfurecido río Aragón. 

Y eso que a media mañana, el caudal había descendido bastante, "porque a primeras horas esto era impresionante. Hacía tiempo que no veía este río así, y eso que suelo venir bastante a menudo".

"Nos ha sorprendido mucho ver el río así", añadía Marta Pérez, de Madrid, desde la nueva pasarela de la estación de Canfranc. "Casi da un poco de respeto ver cómo pasa tanta agua por debajo de nosotras, parece que en cualquier momento va a saltar". A la lluvia, que ha dado una pequeña tregua por la mañana, se ha unido el viento frío, que generaba una sensación térmica bastante baja. "Menos mal que hemos venido preparadas, tanto para la lluvia como para el frío que hace, aunque no pensábamos que iba a llover tanto", subrayaba.

Durante la mañana de este jueves, los Bomberos han tenido que desalojar dos casas en Castiello por seguridad.