Activada la alerta por la avería de un camión con mercancías peligrosas en Monrepós

La avería de un camión con mercancías peligrosas que circulaba por la autovía A-23 a su paso por el puerto de Monrepós, en el término municipal de Arguis, ha obligado a activar este jueves por la tarde la fase de alerta del Plan especial de protección civil ante el riesgo de accidentes por mercancías peligrosas en Aragón (Procimer), según ha informado el 112 y la DGT. Por fortuna, no ha habido que lamentar daños personales.

El suceso se ha producido alrededor de las 16.00 cuando el camión, que había salido de Tarragona y se dirigía a Burdeos (Francia), estaba empezando a subir el puerto, poco antes de llegar al pueblo de Arguis. Transporta 24.320 kilos de hidróxido de sodio, un producto químico que puede resultar corrosivo para los metales y provocar quemaduras graves en la piel y lesiones oculares graves.

Al lugar se ha desplazado la Guardia Civil para señalizar debidamente el incidente y regular el tráfico ya que ha obligado a cortar el carril derecho durante un tramo de dos kilómetros (entre los puntos 379.5 y 381.5). Sobre las 19.30 se pudo retirar el camión y la circulación quedó restablecida. 

Desde el 112 han pedido precaución ante este tipo de situaciones y han lanzando una serie de consejos de autoprotección. En primer lugar, recuerdan que los vehículos que transportan mercancías peligrosas llevan unas placas de color naranja con unas cifras que indican las sustancias que llevan.

Si conduciendo detrás de uno de estos vehículos se observa alguna anomalía como fugas de producto o cualquier otra, hay que comunicarlo lo antes posible al conductor o al 112. En caso de presenciar un accidente, hay que avisar al teléfono 112 y precisar el lugar y la naturaleza del accidente, el número aproximado de víctimas, el tipo de daños materiales y el número que indica la placa naranja del vehículo.

En un siniestro, si no se corre peligro al hacerlo, hay que señalar y balizar el accidente con las luces y triángulos de señalización o con personas en los lugares que convenga. Ante fugas del producto o incendios, hay que mantenerse a una distancia prudencial. Y no se puede fumar en las proximidades del vehículo accidentado.

Por último, si el accidente ocurre cerca de la vivienda, hay que cerrar las ventanas y puertas exteriores, bajar las persianas y alejarse lo más posible del muro de la fachada hasta que se retire el vehículo. También se recomienda cerrar la llave de paso del gas y hacer saltar el automático de la luz.