La Audiencia Provincial de Huesca juzgará este miércoles a un hombre, J. A. M. O., que se enfrenta a penas que suman casi ocho años de prisión por un presunto delito de corrupción de menores y otro de exhibicionismo. El juicio está programado para dos días. 

Según la calificación provisional de los hechos de la Fiscalía, el acusado contactó con la víctima a través del teléfono móvil y le pidió que se grabara vídeos de contenido sexual y se los enviara.

El Ministerio Público tipifica los hechos como un delito de corrupción de menores de 16 años de los artículos 189.1 y 2, que castiga con penas de cinco a nueve años de prisión "al que captare o utilizare a menores de edad o a personas con discapacidad necesitadas de especial protección con fines o en espectáculos exhibicionistas o pornográficos, tanto públicos como privados, o para elaborar cualquier clase de material pornográfico, cualquiera que sea su soporte, o financiare cualquiera de estas actividades o se lucrare con ellas"; y otro de exhibicionismo establecido en el artículo 185 del Código Penal con una pena de entre seis meses y un año de cárcel o multa de 12 a 24 meses por "ejecutar o hacer ejecutar a otra persona actos de exhibición obscena ante menores de edad o personas con discapacidad necesitadas de especial protección".

La Fiscalía aplica la atenuante analógica de alteración psíquica y solicita  por el delito de corrupción de menores la pena de siete años de prisión, la inhabilitación especial para el ejercicio de profesión que conlleve contacto con menores por tiempo de 11 años, una medida de libertad vigilada por tiempo de ocho años con posterioridad al cumplimiento de la pena de cárcel; y la prohibición de aproximarse a la menor a menos de 500 metros y de comunicarse con ella durante 10 años. Y por el delito de exhibicionismo, pide una pena de otros nueve meses de cárcel.