La Fiscalía rebaja a 6 años de cárcel su petición para un hombre por violar a una amiga de su mujer en Barbastro

La víctima reconoce que el acusado pudo confundir sus intenciones. La acusación particular solicita 4 años de prisión y la defensa reclama la absolución por entender que no se ha probado la penetración.

El acusado de agresión sexual, durante su declaración en el juicio de la Audiencia Provincial de Huesca.
El acusado de agresión sexual, durante su declaración en el juicio de la Audiencia Provincial de Huesca.
Verónica Lacasa

La Audiencia Provincial de Huesca ha dejado este jueves visto para sentencia el juicio contra Ayoub H. por violar presuntamente a una amiga de su mujer, de 24 años, en el parquin del Hospital de Barbastro. La Fiscalía ha rebajado su solicitud de 10 a 6 años de cárcel al aplicar la atenuante de consumo de alcohol y de cocaína ya que entiende que pudieron mermar sus facultades. Mientras, la acusación particular también ha reducido su petición a 4 años al descartar la agravante de abuso de confianza. Y, por último, la defensa ha reclamado la absolución porque su cliente ha reconocido que intentó besar a la víctima y que le hizo tocamientos, pero ha negado que la penetrara

Según han relatado en el juicio, el acusado, que está casado y tiene tres hijos, llamó a la víctima el 3 de enero de 2022 para pedirle 10 euros y quedar con ella porque se había peleado con su mujer y necesitaba hablar. Quedaron en la calle y el procesado, que estaba muy alterado, le propuso ir juntos en su coche a un supermercado, donde ella compró seis cervezas para él y un refresco para ella. Y fueron hasta el parquin del hospital de Barbastro, donde estuvieron charlando alrededor de una hora. 

Ayoub H. ha atribuido los hechos a "un malentendido" ya que al ver que la chica había ido "arreglada y perfumada", pensó que quería "algo más" con él así que intentó besarla "porque en nuestra cultura -árabe-, cuando una mujer viene contigo a solas es porque quiere algo", ha manifestado. "Pero cuando me dijo que no quería nada, paré y la dejé", ha añadido. Además, ha admitido que le tocó un pecho pero por encima de la ropa y que antes del encuentro había consumido cocaína y que dentro de coche había bebido varias cervezas.

Por su parte, la víctima ha dado otra versión de los hechos. Según dijo, cuando se encontró con el acusado vio que "no estaba normal, parecía borracho". Ya dentro del coche, él le contó que tenía problemas con su mujer y en un momento la agarró de la mano y la intentó besar. "Me dijo que le gustaba y que me quería", ha dicho. Además, la agarró por el pelo y cuando ella intentó abrir la puerta del coche para escapar -estaba con el seguro puesto y no pudo-, "llegó a besarme, me tocó los pechos por debajo de la ropa y también me metió la mano debajo del pantalón", ha explicado, llegando a introducirle los dedos en su vagina. Ella empezó a llorar y le convenció para que le llevara al supermercado y que luego harían "lo que quisiera". Él condujo entonces hasta el establecimiento y mientras esperaba a que volviera, ella logró escapar por una puerta trasera. 

La defensa le ha preguntado si cree que el acusado pudo confundir sus sentimientos o que le había dado pie a algo más. "Creo que sí, porque yo no estaba haciendo cosas para que él sintiera algo", ha respondido la joven. 

La víctima también ha asegurado que ese mismo día le contó lo que había ocurrido a su hermana pequeña, menor de edad, pero no denunció los hechos hasta ocho días después. Además, no contó nada acerca de una penetración ni ante los médicos que la examinaron ni ante la Guardia Civil -lo hizo por primera vez en sede judicial- por miedo a la reacción de su familia ya que sentía "vergüenza" y al estigma social.

"Para los árabes, nuestra reputación es lo más importante"

Su hermana ha corroborado su relato recordando que la llamó "llorando y con un ataque de ansiedad". Además, ha explicado que en un principio no se atrevía a denunciar al acusado "porque no quería que entrara en la cárcel por sus hijos". También ha asegurado que la víctima ha sufrido graves secuelas psicológicas a raíz de estos hechos "porque para los árabes, nuestra reputación es lo más importante que tenemos y después de lo que pasó, la gente le preguntaba en la calle si le había robado el marido a una amiga y eso le afectó muchísimo". Tanto que ha tenido que viajar a Marruecos "para curarse". 

La médico que la exploró en el centro de salud de Barbastro el día que presentó una denuncia solo observó un arañazo en uno de lo pechos y dejó reflejado en su informe que la víctima había recibido golpes en la cara y en el tórax y tocamientos pero que había negado la penetración. 

En el turno de conclusiones, la Fiscalía ha rebajado su petición inicial de 10 a 6 años de cárcel  y ha añadido 11 años de inhabilitación para ejercer cualquier profesión con menores. Y es que ha dado plena credibilidad al testimonio de la víctima "porque el arañazo prueba que le agarró del pecho y no tiene sentido que se invente parte del relato y otra parte no".  También ha disculpado que tardara más de una semana en denunciar "porque para una mujer joven que ha crecido en ese contexto cultural está mal visto que quede con un hombre a solas y de hecho mucha gente la señala por la calle diciendo que ella es la culpable, lo que le supone una gran vergüenza". Con todo, ha recalcado que "ir perfumada o arreglada no es suficiente para atentar contra la libertad sexual de nadie".

Mientras, el abogado de la defensa ha manifestado que su cliente pudo "confundir" las intenciones de la víctima "porque en su cultura se entiende que al irse juntos en un coche ella quería algo más", aunque ha insistido en que "no le obligó a hacer nada" y que ella ha cambiado su declaración varias veces "pero mi cliente ha mantenido la misma siempre". Por ello, ha pedido la absolución o subsidiariamente un delito de agresión sexual sin acceso carnal -castigado con penas de 1 a 4 años- con la atenuante cualificada de consumo de alcohol y drogas.

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