Piden 21 años para un grupo de militares de la Guardia Real por una agresión racista en Jaca

Agredieron presuntamente a dos personas profiriéndoles expresiones "con carácter discriminatorio", según la Fiscalía.

Imagen de la calle Gil Berges, donde se produjo la presunta agresión hace cinco años
Imagen de la calle Gil Berges, donde se produjo la presunta agresión hace cinco años
Laura Zamboraín

Un grupo de siete militares de la Guardia Real se sentará en el banquillo de la Audiencia Provincial de Huesca a partir del próximo lunes y durante cinco días para enfrentarse a penas que suman 21 años de prisión –tres para cada uno– por una presunta agresión racista ocurrida hace cinco años en una zona de bares de la ciudad de Jaca.

Un grupo de soldados, que estaban realizando un curso de instrucción de técnica invernal en la zona, protagonizó aquel fin de semana del 26 de enero de 2014 dos trifulcas con vecinos de Jaca que se saldaron con un cruce de denuncias. La primera, en la que estuvieron implicados otros dos civiles, ya se sustanció en su día en un juicio de faltas y la resolución de la segunda se ha demorado hasta ahora.

Según el escrito provisional de la Fiscalía oscense, los hechos se produjeron en una hora indeterminada a partir de las 4.30 de la madrugada en el entorno de los locales de ocio nocturno de la calle Gil Berges. Los siete acusados se dirigieron a la víctima y un acompañante y "movidos por el ánimo de menoscabar su integridad física", les propinaron puñetazos y patadas en todas las partes de su cuerpo.

"Negro, moro, musulmán"

No obstante, focalizaron "especial violencia y agresividad", según relata el ministerio público, en la víctima principal motivada por su condición racial ya que la agresión fue acompañada de expresiones como "negro, moro, musulmán", las cuales "fueron proferidas con carácter peyorativo y discriminatorio", resalta la Fiscalía.

A consecuencia de estos hechos, el perjudicado sufrió lesiones en la cara, la espalda y la cadera, fundamentalmente. Heridas que tardaron en curar 55 días y que le han dejado secuelas en forma de cicatrices y pérdida de varias piezas dentales. Mientras, la otra persona agredida sufrió policontusiones, erosiones superficiales en la cara, el cuello y una pierna y dorsalgia que precisaron asistencia médica y tardaron en sanar 12 días. En su caso también le quedó una pequeña cicatriz en la pierna.

La Fiscalía solicita condenas de 3 años de prisión para cada uno de los siete acusados por un presunto delito de lesiones con la agravante de discriminación, así como la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de la víctima principal durante 5 años y el pago de una indemnización de 5.502 euros por las lesiones y el perjuicio estético causado.

También reclama una condena de 2 meses de multa a razón de 6 euros diarios (360 euros) por una presunta falta de lesiones al acompañante de la víctima, la prohibición de acercarse a menos de 500 metros de su domicilio o de lugar de trabajo, así como una indemnización de 700 euros.

Solicita archivar sus denuncias

Por otra parte, la Fiscalía oscense solicita también el sobreseimiento de las actuaciones judiciales abiertas a raíz de las denuncias de lesiones constitutivas de falta presentadas por los acusados al entender que no quedó acreditado que la víctima fuera el causante de las mismas.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión