Sin agua en algunas comunidades de regantes por los destrozos en las acequias

Los vientos huracanados que destrozaron el pasado domingo granjas, cultivos y zonas verdes de Monegros también se cebaron  con las infraestructuras de regadío. Los árboles caídos destrozaron numerosos tramos de acequias, por lo que durante varios días se tendrá que interrumpir el riego. El alcalde de Almuniente, Joaquín Monesma, habla de "cientos de árboles", que han hecho "mucho daño" en las canalizaciones. "Habrá comunidades de regantes que tendrán que estar días sin poder regar", ha comentado, lo que se suma a otros efectos nocivos sobre el sector agrario, como destrozos en instalaciones ganaderas o en campos de maíz y alfalfa, además de los desperfectos que tendrán que solucionar los ayuntamientos en el mobiliario urbano. Monesma ha explicado que en la localidad de Frula, debido a la caída de torres eléctricas, la mitad de la población solo dispone en sus casas de alumbrado, pues no hay potencia suficiente para utilizar los aparatos electrodomésticos.

Este martes está convocada una reunión con todos los alcaldes afectados en la subdelegación del Gobierno, a la que también asistirá el delegado del Gobierno de Aragón en Huesca. "Vamos a poner sobre la mesa todos los daños y a ver qué se puede hacer", ha comentado el alcalde de Almuniente, quien cree que la Confederación Hidrográfica del Ebro también se tiene que implicar para reparar las infraestructuras de regadío.

A este respecto, el presidente de Riegos del Alto Aragón, César Trillo, ha anunciado que las brigadas de la Comunidad General de regantes van a empezar a trabajar en la reparación de los desperfectos, lo mismo que los servicios de la CHE. Entre las comunidades afectadas están las pertenecientes a los municipios de Robres, Torralba, Valfonda, Tardienta o Almuniente. Trillo se ha quejado de las trabas impuestas por las autoridades medioambientales a la tala de árboles junto a las acequias. "No te dejan cortar chopos que están pegados a las infraestructuras y ahora tendrían que venir ellos a solucionarlo. No puede ser que crezca un chopo junto a una acequia y no se pueda cortar". A su juicio, estas canalizaciones no se pueden ver perjudicadas por riesgos de este tipo en caso de una tormenta, porque el daño económico, en caso de tener que interrumpir el riego, es muy grande, ya que se podrían perder las cosechas.