La lista de fallecidos en la montaña de este verano se ha incrementado este miércoles con un senderista de 47 años, vecino de Huesca, que ha muerto por causas naturales en el ibón de Estanés, en el término municipal de Ansó.

La Guardia Civil recibió sobre las 13.45 una llamada en el 062 informando de que una persona se había desplomado en un terreno llano. Se activó inmediatamente a especialistas del Sereim de Jaca, la Unidad Aérea de Huesca y la enfermera del 061.

Una vez en la zona, encontraron a la víctima junto a varios acompañantes. El facultativo comprobó las constantes vitales y solo pudo certificar su fallecimiento. El cuerpo fue trasladado a Jaca. Con esta ya son ocho las personas que han perdido la vida este verano entre el Pirineo y la Sierra de Guara.

Por otra parte, el Greim de Boltaña, la Unidad Aérea con base en Benasque y el médico del 061 también han auxiliado este miércoles a una senderista que había sufrido una posible lesión de tobillo cuando hacía una ruta con varias personas en el valle de Barrosa, en el término de Bielsa.

Una vez localizado el grupo en un claro de un bosque, el helicóptero dejó a los especialistas y al facultativo, que inmovilizaron la extremidad lesionada de la senderista y la evacuaron al helipuerto de Boltaña. De allí fue conducida en ambulancia al hospital de Barbastro. Era una mujer de 60 años, vecina de Salamanca.