Un total de 36 niños nacidos en el último año recibieron este jueves su primera pañoleta de San Antolín en Sariñena. El acto cumplió su décima edición y de nuevo, contó con una alta afluencia de público. A los pies del escenario, madres, padres y ante todo, decenas de abuelos buscaron su hueco para inmortalizar el momento con las cámaras de sus teléfonos móviles. Nadie quería quedarse sin la imagen de tan emotivo momento.

Por tercer año consecutivo, la puesta de pañoletas, que solía estar integrada en la cabalgata inaugural, se realizó en la víspera del inicio oficial de las celebraciones, lo que permitió "darle mayor realce", tal y como explicó la concejal de Fiestas, Margarita Trallero. Las mairalesas mayores e infantiles fueron las encargadas de colocar el pañuelo azul a los nuevos vecinos de la localidad. Dentro de ellos, estuvieron Eva, Adrián o Ixeia, que, junto al resto de recién llegados, son la prueba de que la villa y por supuesto, las fiestas tienen garantizado "un gran futuro". Así lo dijo cantando Paco Lasierra, más conocido como ‘el chato de Pallaruelo’, que, junto al resto de componentes de Aires Monegrinos, fueron los siguientes en tomar el escenario y dar inicio a la tradicional ronda jotera. A su lado, estuvo otro gran cantador, Javier Badúles, ganador del último premio extraordinario del Certamen Oficial de Jota de Zaragoza. Ambos volvieron a demostrar su capacidad para componer jotas alusivas, dedicando piezas a la cercanía de las fiestas o la belleza de las mairalesas.

Los festejos arrancarán este viernes, a partir de las 11.30, con la cabalgata inaugural, que contará con la participación de varios grupos musicales y de animación. Al finalizar, tendrá lugar el pregón a cargo de dos reconocidos folcloristas, Martín Blecua y Pedro Mir. La primera jornada incluirá además reparto de melocotón con vino, pasacalles musical, fiesta del jamón y la cerveza, verbenas nocturnas así como la salida de tres toros de fuego. En esta ocasión, las fiestas de San Antolín no incluyen actos de carácter taurino, tras la baja afluencia de público registrada durante los dos últimos años.