El Ayuntamiento de Puértolas ha recibido autorización del departamento de Vertebración del Territorio del Gobierno de Aragón para organizar un sistema de visitas y la carretera del cañón de Añisclo ha quedado abierta para vehículos de uso turístico de pequeñas dimensiones (un total de seis) durante la temporada de verano. Este acceso estaba cerrado desde abril de 2017 debido a un túnel con peligro de derrumbe y donde se realizan obras de reparación, condicionadas por la meteorología.

Alcaldes y empresarios de la zona habían reclamado el posible uso de esta vía, con determinadas limitaciones, para evitar afecciones al sector turístico un verano más, ya que 170.000 visitantes utilizaban cada año esta carretera para acceder a este sector del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, que en 2018 celebra el centenario de su creación. La efemérides ha pesado a la hora de tomar la decisión

El Ayuntamiento de Puértolas no ha tenido tiempo para organizar un servicio de visitas a la parte sur del cañón de Añisclo, pero sí lo han hecho dos empresas de la zona, según indicó el alcalde, José Manuel Bielsa. El Parque ha dado autorización a seis vehículos del municipio, entre ellos a dos taxis, para que vayan por esta carretera. Son unos 6 kilómetros desde la barrera colocada en Fuente de los Baños hasta unos 300 m antes de llegar al túnel.

El director de Ordesa, Manuel Montes, explicó que esta zona del cañón de Añisclo es complicada porque la carretera es muy estrecha, tiene pocos apartaderos y hay peligro de desprendimientos. Es por ello que la circulación de los vehículos deberá hacerse en caravana con un máximo de cinco. "Se trata de que no se encuentren subiendo y bajando por el mismo sitio" dijo. Tampoco se podrá pasar de noche.

Aparte del número y el horario (9.00 a 21.00) se han establecido otras condiciones, como los sitios donde estos vehículos pueden parar para que los turistas bajen y admiren el cañón. Además, cuando los excursionistas estén fuera de los coches o furgonetas deberán ir equipados con casco. "Son determinados puntos donde hay menos riesgo, según un estudio que se hizo hace algunos años" indicó Montes.

Las llaves del candado

El control de acceso no se lleva a cabo con personal. El Ayuntamiento de Puértolas, el personal de Ordesa, la Guardia Civil y los titulares de los vehículos autorizados han recibido llaves del candado que cierra la barrera de Fuente de los Baños.

La empresa Solomonte, una de las dos del sector que hay en el municipio, ya realizó el pasado viernes una visita. Su gerente, Juan José Naranjo, indicó que las rutas que se han organizado tienen una duración de dos horas, con salidas cada 30 minutos en Escalona desde las 15.30. A partir de agosto se establecerán, además, viajes por la mañana.

Los tres vehículos de los que dispone la empresa para estas excursiones tienen capacidad para ocho personas, son sobreelevados y con tracción a las cuatro ruedas. Los viajes tienen distintas paradas. Naranjo detalló que la primera se hace antes de entrar en el cañón para explicar en que consistirá la actividad. Después, se para en el desfiladero de Las Cambras, "el punto más espectacular de todo el recorrido"; en la zona de ‘la placa’ (donde se marca la altura registrada por el río Bellós en una crecida), en un punto donde se explica la inversión térmica de los cañones...

El gerente de Solomonte insistió en que los visitantes irán acompañados por un guía con titulación especializada. Antes de que se cerrara la carretera, esta empresa ya organizaba excursiones de estas características, aunque llegando a San Úrbez.

El director de Ordesa señaló que el Departamento de Vertebración del Territorio ha autorizado este uso como algo "excepcional" mientras se desarrollan las obras pero "en el momento en que se vea que hay riesgos por lluvias para la seguridad se suspenderá". En principio, estará vigente el periodo estival, es decir, hasta el 21 de septiembre. No obstante, si se considera que es necesario prolongarlo "se trataría con Carreteras y todas las partes afectadas". Montes manifestó su confianza en que el túnel esté reparado en seis meses, es decir a finales de año, si la meteorología lo impide.