Los alcaldes de Peralta, Berbegal y Villanueva de Sijena se han dirigido al Vaticano para denunciar la exposición de la obra ‘Presos políticos en la España contemporánea’ en el Museo Diocesano de Lérida, donde aparecen varios exconsejeros de la Generalitat en prisión pero también los dos chilenos condenados por colocar una bomba en El Pilar.

Obdulia Gracia (alcaldesa de Peralta), José Carlos Boned (Berbegal) y Alfonso Salillas (Villanueva) han entregado este miércoles en Correos sendas cartas dirigidas a la Congregación para los Obispos, la Secretaría de Estado Vaticana y el Consejo Pontificio para la Cultura.

"¿Cómo es posible que el Obispado de Lérida sea patrono de un museo que se dedica a autorizar exposiciones de obras que glorifican como perseguidos políticos a terroristas que han atentado en templos católicos?”, señala la misiva. Según los alcaldes, hay una manifiesta y flagrante violación de la circular vaticana sobre los museos eclesiásticos que el Obispado de Lérida una y otra vez vulnera con el propósito de no devolver las 111 obras de arte religioso de las parroquias aragonesas.

Los representantes municipales exigen una vez más que Roma obligue al obispo de Lérida a abandonar “inmediatamente” ese consorcio museístico para cumplir la circular y sobre todo, “sin más demora”, proceda a retornar las obras aragonesas, tanto las del Obispado de Barbastro-Monzón como las de la diócesis de Huesca, a la que pertenecen Berbegal y Peralta, de cuyas parroquias también salieron piezas con destino a Cataluña. Pese a llamarse Museo Diocesano y Comarcal de Lérida, dicen que es un museo estrictamente civil y no eclesiástico.