El hospital de Jaca cuenta con una cartera de servicios de 20 especialidades, sin embargo, no está cubierta, ya que ahora ni se atienden urgencias ginecológicas ni hay radiólogo. Sanidad ha reconocido que el "principal problema" es que no hay especialistas que quieran ir a trabajar a este centro, y tampoco se baraja la opción de trasladar a facultativos del San Jorge u otros hospitales porque "habría que desmontar servicios que ya funcionan". La única solución es contratar a médicos para completar la plantilla.

Según el Servicio Aragonés de Salud, la cartera de servicios está compuesta por las siguientes especialidades: alergología, cardiología, neumología, neurología, medicina interna, digestivo, anestesiología, cirugía general, ORL, oftalmología, urología, ginecología y obstetricia, traumatología, nefrología, medicina preventiva, farmacia hospitalaria, urgencias, pediatría, radiología y análisis clínicos. Pero desde el viernes los partos y otras urgencias ginecológicas se derivan a Huesca y los pacientes tampoco se pueden hacer ecografías u otras pruebas al no haber radiólogo desde septiembre. "Estos son los principales problemas que tenemos ahora", reconoce el gerente del sector de Huesca, Javier Moliner.

En el primero de los casos, de 8.00 a 15.00 se atiende a las pacientes, ya que los ginecólogos pasan consulta en el hospital y se mantienen las matronas las 24 horas. "Luego se valora si hay que trasladar o no a Huesca", indica. El Salud "sigue intentando contratar a un profesional, esta es la primera opción, porque llevar gente de otros centros no es posible, ya que tendríamos que desmontar servicios que ya están funcionando y esto no parece prudente ni defendible", añade. La idea es seguir apostando por mantener los partos, porque ahora "no habría razones para eliminar el servicio", siempre y cuando haya personal necesario.

Cabe recordar que el año pasado hubo en el hospital de Jaca 155 alumbramientos, un número "que está en el límite, porque en comparación con otras maternidades es bajo", explica Moliner. Los estándares del Ministerio de Sanidad "dicen que es razonable tener unos 600 partos al año, pero si hay dispersión demográfica u otras cuestiones, pueden ser menos". Por otro lado, al no haber ginecólogo podrían cancelarse algunas intervenciones quirúrgicas, aunque hay cirujano, pero en algunos casos es el ginecólogo el que ayuda. El cirujano deberá valorar si puede operar o si hay que trasladar al paciente.

Respecto a la radiología es un servicio que no se presta desde septiembre. "Es otro de nuestros problemas importantes y no logramos contratar", apunta el gerente. "Hemos concertado con empresas externas y ha habido pacientes que han tenido que ir a Huesca a hacerse ecografías, lo que sí hay es el concierto de la unidad móvil, que hace tac, mamografías y resonancias".

Según Moliner, el hospital "cubre la cartera de servicios básica de un centro que atiende a unas 30.000 personas y para eso tiene recursos materiales suficientes", explica. Las renovadas zonas de quirófanos "permiten hacer algo más que ahora y en eso estamos trabajando, en ampliar servicios como la cirugía mayor ambulatoria", reconoce. "Tenemos que sacar más rendimiento, eso es verdad, pero necesitamos profesionales", concluyó.