‘Nada nos para’ para luchar por la discapacidad intelectual, el reto de Amibil
Treinta años después de su creación, motivada por el interés de un grupo de familias con niños con discapacidad intelectual y del desarrollo, Amibil se ha convertido en un referente social, económico y asistencial en la comarca Comunidad de Calatayud, donde atiende a más de setenta usuarios
Dice una leyenda urbana que la mayoría de los grandes proyectos de los últimos tiempos, sueños que parecían inalcanzables, han surgido en un garaje. En el caso de la Asociación de Familias de Personas con Discapacidad Intelectual y del Desarrollo Amibil, no está muy claro dónde surgió la primera idea, pero el sueño, treinta años después, es una realidad que permite atender a 71 usuarios y cuenta con 118 socios numerarios, además de cinco honoríficos y 44 protectores.
Durante este tiempo, Amibil se ha convertido en todo un referente, no solo dentro del mundo de la discapacidad intelectual, sino también en la sociedad de la comarca Comunidad de Calatayud, gracias a las más de 230 actividades que promueven al año entre los usuarios y sus familias.
"Nuestro papel ha sido trabajar con esfuerzo e ilusión, de forma muy generosa, para dar la oportunidad de permanecer en su territorio a un colectivo, las personas con discapacidad intelectual y sus familias, que tradicionalmente eran excluidas de su comunidad y hoy forman parte de la misma. Desde Amibil hemos contribuido al famoso equilibrio territorial, generando cohesión social y riqueza económica a nuestro territorio", explica Lucrecia Jurado, directora-gerente de Amibil.
A lo largo de estos treinta años, desde la entidad también han puesto en marcha numerosos recursos dirigidos a este colectivo, como los servicios de atención de día, residencia o el servicio de ocio, deporte y familia, entre otros. Y todo ello sin olvidarse del Centro Integral de Tratamientos, que está abierto a toda la población.
"Además, en el ámbito económico contamos con más de 60 mujeres que conforman la plantilla. Y, en 2012, pusimos en marcha el CEE Adibil, que cuenta con once trabajadores, ocho de ellos personas con discapacidad intelectual y del desarrollo, que demuestran que es posible la inclusión laboral en los sectores de jardinería, lavandería y conserjería. Se trata del único CEE en la provincia dedicado a la discapacidad intelectual y del desarrollo", matiza.
‘Nada nos para’
Por todas estas razones, no resulta nada extraño que el lema de su 30 aniversario sea ‘Nada nos para’, un claro mensaje en un momento en el que la entidad afronta importantes retos que marcarán su futuro a medio y, sobre todo, a largo plazo.
Entre otras muchas cosas, Amibil está inmersa en un importante proceso de acreditación por parte de Plena Inclusión, sigue promoviendo la mayor participación de familias, y trabaja para ampliar sus instalaciones.
"Con 71 usuarios y una atención cada vez más especializada y acorde a los apoyos personalizados que cada caso requiere, es imprescindible dotar las actuales instalaciones de nuevos espacios. Queremos construir viviendas para personas con discapacidad intelectual ligera y reservar espacios donde atender a personas con graves problemas de conducta y mayor necesidad de apoyo, así como zonas verdes para esparcimiento de usuarios, especialmente los residentes", indica.
Entre sus retos de futuro también está "continuar con las reivindicaciones para la mejora de la calidad de vida de estas personas y sus familias y posicionar a Amibil como un elemento diferenciador positivo y garante de una atención de calidad".
Y todo ello gracias al apoyo de numerosas entidades públicas y privadas, pero, sobre todo, al empuje de todas y cada una de las familias que han pasado por esta entidad, y que el 29 de abril de 1994 dieron forma a un proyecto de vida que se ha convertido en todo un ejemplo en Calatayud y toda la comarca.
