El consejero de Sanidad, José Luis Bancalero, ha adelantado este martes que el Departamento quiere impulsar la colaboración con las farmacias de Aragón para los cribados poblacionales y los programas de detección precoz de cáncer. Así lo ha reconocido antes de asistir a la toma de posesión de la junta de gobierno del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza, donde se ha ratificado a Raquel García Fuentes al frente por segundo mandato consecutivo.

"El farmacéutico -ha dicho el consejero- es un actor principal dentro de lo que es la atención sanitaria, tanto a nivel hospitalario como, muy importante, en el área en el ámbito de la atención primaria". Y además, ha reiterado, "es un profesional sanitario cercano a la población tanto urbana como, especialmente, rural".

De ahí que la Consejería busque la implicación de las boticas para promocionar y concienciar a la sociedad sobre la importancia de participar en los programas de detección precoz de cáncer. Los presidentes de los tres colegios provinciales de farmacéuticos ya trasladaron esta iniciativa al consejero en octubre del año pasado, en una reunión en la que pusieron a disposición de Sanidad "todo el activo de la profesión farmacéutica", sobre todo la red de 731 farmacias repartidas por todo el territorio. Casi 200 de ellas se encuentran en municipios de menos de 800 habitantes. 

En esa primera toma de contacto, se abordó la necesidad de contar con la participación de las farmacias en los cribados o detección precoz de enfermedades ocultas. Como por ejemplo en los cribados de cáncer colorrectal. Se trataría así de apoyarse en la red de farmacias para mejorar la accesibilidad a la prueba y conseguir que la participación de la población sea más alta. En la Comunidad, más del 60% de quienes son invitados a realizarse la prueba de sangre oculta en heces no acude.

Se trata, ha añadido Bancalero, de que sirvan de "nexo e impulso", con la intención de potenciar la prevención ante estas enfermedades. "Sería un modelo más desarrollado que el que se ha podido tener en otras comunidades autónomas, pero muy parecido: el farmacéutico sería de este modo el vínculo entre el ciudadano y el Servicio Aragonés de Salud".

A falta de que se concreten los detalles sobre el acuerdo, que se quiere poner en marcha "a la mayor brevedad posible", detectarían a la población "que no se haya adherido al al plan del cribado" a través de la base de datos. Las boticas también podrían colaborar con "tareas de sensibilización" e "incluso con algún plan que también tenemos encima de la mesa".

Para la presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Zaragoza, ha recordado el papel que jugaron estos establecimientos durante la pandemia de covid-19, "siendo pioneros en la realización de test tanto de coronavirus como de certificados de vacunación y de recuperación". Y ha reiterado el apoyo a la Consejería y su colaboración en temas de Salud Pública, "siempre por el bien de la población".