borrasca mónica
Las estaciones de esquí de Aragón esperan un buena recta final tras las mayores nevadas de la temporada
Astún-Candanchú ha pasado de 37,5 a 65,5 kiómetros esquiables y Fomigal-Panticosa, de 56 a 67 gracias al paso de las borrascas. Las precipitaciones de nieve continuarán varios días más.
Han tenido que esperar a la última semana de febrero para recibir las mayores nevadas de la temporada. Las borrascas Louis y Mónica han dejado este fin de semana abundantes precipitaciones en las estaciones del Pirineo aragonés, especialmente en la zona más occidental, que han permitido ampliar la superficie esquiable en casi 40 kilómetros sumando las nuevas pistas que han abierto Astún-Candanchú y Formigal-Panticosa. También los espesores máximos se han incrementado de 90 a 120 cm.
Un panorama que permite a las estaciones mejorar sus perspectivas de cara al último mes de campaña ya que cerrarán el próximo 31 de marzo, tras la Semana Santa. Y aunque ninguna de ellas da por garantizado al 100% que se pueda seguir esquiando en buenas condiciones hasta entonces, se felicitan de que estas nevadas les dan "mucha tranquilidad" para las próximas semanas.
Así, el director Álvaro Luna, destaca que han podido triplicar su dominio después de estos dos frente ya que el jueves ofrecían 11,5 km y hoy abrirán 38. "Ha habido mucho volumen de nieve, pero al compactarla se convierte en una capa más fina. Aun así, nos ha venido muy bien ya que, además, como ha venido acompañada de frío, hemos podido producir nieve con cañones", señala.
Las cotas altas, ya aseguradas
Luna remarca que la recta final de la temporada está sujeta todavía a las previsiones de más nevadas para esta semana "que nos permitirían ir consolidando nuevas zonas". Con todo, cree que las cotas altas tienen ya nieve suficiente para lo que resta de temporada "y si las condiciones meteorológicas se mantuvieran dentro de unos límites más o menos razonables, también podríamos mantener la que tenemos ahora en cotas bajas". No obstante, insiste en que todo dependerá de la meteorología a partir del 15 de marzo, "que es cuando se compromete más el manto blanco".
También Andrés Pita, subdirector general de Astún, reconoce que con estas nevadas "y con la que aún tienen que caer estos próximos días" han mejorado las perspectivas de cara a un mes de marzo que tiene dos fechas muy destacadas, el puente de San José y la Semana Santa. "Aunque lo que más va a animar es que mucha gente no ha esquiado aún todo lo que esquiaba habitualmente en otras temporadas", resalta. Por ello, a partir de ahora confía en que acompañe el sol «porque entonces seguro que tenemos un aluvión de clientes".
Pese a este optimismo, Pita insiste en que no se atreve a garantizar un buen cierre de temporada. "Esa palabra está prohibida si hablamos del tiempo porque nadie sabe lo que va a pasar en un futuro", subraya. No obstante, también admite que "evidentemente las condiciones ahora son buenas porque van a subir los espesores tanto en calidad como en cantidad y, además, con la ventana de frío tan amplia vamos a producir nieve".
Después de un sábado con una notable afluencia a las estaciones, la de ayer fue menor por las complicadas condiciones que presentaron las carreteras de acceso, todas ellas con cadenas. No obstante, hubo quien no se resistió a disfrutar de la nieve polvo.
"Estamos gozando"
"Una gozada" o "una nieve «maravillosa" fueron las expresiones que más utilizaron los esquiadores que subieron a Candanchú. "Hay una diferencia abismal entre la semana pasada y esta, y aunque el tiempo no es del todo bueno, estamos disfrutando mucho", dijo Ibón Azkaitz mientras esperaba a coger un remonte. Tanto él como sus amigos "habíamos dudado en venir por la previsión meteorológica, y aunque el acceso esta mañana estaba con nieve, no nos arrepentimos, porque estamos gozando", aseguró este esquiador vasco.
"La nieve está muy bien y da gusto ver así la estación", manifestó María Rodríguez, de Zaragoza. Junto a su familia son asiduos a este centro invernal del valle del Aragón y tampoco quisieron perder la oportunidad de deslizarse por nieve recién caída. "Aunque el tiempo no es del todo bueno, también hay que tener en cuenta que estamos en la montaña", afirmó. Además, tenía ganas de "tiempo invernal" después de la meteorología "tan atípica" que ha habido este mes de febrero. "Estas nevadas permiten además que se puedan abrir más pistas y kilómetros y dan confianza de cara al final de la temporada", añadió
También Juan Luzán, de Zaragoza, calificó el estado de la estación de "maravillosa". "A pesar de que daban malo, hemos venido igualmente a pasar el día al valle del Aragón y estamos esquiando tanto en Astún como en Candanchú", explicó satisfecho.
