El Gobierno de Aragón pagará parte de la nueva Romareda con fondos de la venta del suelo de Microsoft
Utilizará también sobrantes de la Corporación Empresarial para completar los 20 millones iniciales. Si la sociedad del estadio se retrasa a 2024 se recurrirá a ingresos de la operación de Montepino
El Gobierno de Aragón pagará su participación en la operación Romareda con fondos de la venta de suelo a Microsoft y con los remanentes que hay disponibles en la Corporación Empresarial Pública de Aragón (CEPA). Así lo confirmó este miércoles el consejero de Hacienda, Roberto Bermúdez de Castro, en el debate a la totalidad del presupuesto de 2024 que tuvo lugar en las Cortes de Aragón.
En el caso de que la sociedad que debe construir y explotar el campo de fútbol no se constituya antes del 31 de diciembre, se recurriría a ingresos vinculados a la enajenación de los terrenos de la antigua Universidad Laboral a la empresa especializada en gestión de activos inmobiliarios Montepino.
Bermúdez de Castro respondía a las dudas que había expresado la oposición a propósito de la partida para La Romareda.De hecho, el diputado socialista Óscar Galeano consideró que el proyecto seguía «el estilo oscurantista» del Ejecutivo, dado que no era fácil encontrar la partida. El portavoz de CHA, José Luis Soro, acusó al Gobierno de «esconder» los 20 millones de euros previstos para la Romareda en un programa de «rehabilitación de patrimonio público y viviendas por entidades locales».
Aportación al capital social
Tras decir que de fútbol «sabe una barbaridad» (fue directivo de la Liga de Fútbol Profesional), Bermúdez de Castro asumió que se ha podido cometer algún «error» que se subsanará en el trámite de enmiendas. Pero en cualquier caso quiso aclarar de dónde sale el dinero, para evitar polémicas sobre si el estadio detrae fondos de otras partidas.
Dejó claro que la aportación al capital de la sociedad pública, que se quiere constituir antes del 31 de diciembre junto al Ayuntamiento de la capital y el Real Zaragoza, saldrá de ingresos no previstos inicialmente por el Gobierno autonómico. Entre las tres instituciones van a aportar a partes iguales 120 millones de euros hasta 2027, en los que se incluye la tasación del suelo sobre el que se levantará el campo y el coste del proyecto de ejecución. La nueva Romareda tiene un precio estimado de 140 millones de euros.
El consejero explicó que la DGA va a aportar 40 millones para el campo de fútbol, de los que 20 se deben abonar en la constitución de la sociedad en 2023. Los 20 restantes se atienden a razón de 5 anuales hasta 2027. Si se cumple lo previsto y la entidad está en marcha antes de que acabe el año, el Ejecutivo autonómico utilizará remanentes de la CEPA y de la venta de los suelos de Microsoft en el Parque Tecnológico del Reciclado para comprar las acciones que le correspondan.
Bermúdez de Castro no aclaró cuánto dinero se utilizaría de la venta de Microsoft (la parcela para su futuro centro de datos se enajenó hace unas semanas por 24,5 millones), aunque fuentes consultadas indicaron que podría rondar el 30% o 40%. El resto saldría de los sobrantes de la Corporación Empresarial Pública.
Pero el presupuesto de 2024 incluye una partida de 20 millones de euros para atender la situación que se generaría si al final no se constituye la sociedad del estadio antes del 31 de diciembre. En ese caso, ya no se recurriría a los ingresos previstos por la operación de Microsoft, sino a la de Montepino, que supuso unos recursos de 25 millones de euros aproximadamente. Si se desembolsan los 20 millones en 2023, en 2024 sobrarían 15 millones, dado que solo sería necesario utilizar los 5 previstos en el cronograma inicial.
Bermúdez de Castro recordó a la oposición que la mayoría de los campos de fútbol de España se han pagado con fondos privados. «Aquí no lo ha permitido la izquierda. Con dinero que podríamos destinar a otras cosas estamos obligados a pagar una rehabilitación histórica, necesaria para la ciudad de Zaragoza», declaró el consejero de Hacienda.
