La DGA crea un nivel de "riesgo extremo" de incendios y limita las actividades agrícolas y deportivas en el monte
El Gobierno de Aragón crea el nivel de riesgo rojo plus para #casos críticos en los que se podría prohibir el acceso.
Tras la dramática ola de incendios del pasado verano, Aragón estrena un quinto nivel de índice de riesgo, el rojo plus, para cuando exista un peligro extremo de fuego y la situación sea crítica. Una alerta que solo se aplicará en la Comunidad y que viene a sumarse a las cuatro ya existentes: verde, amarillo, naranja y roja, esta última correspondiente con un peligro muy alto de incendio.
Con la activación del nivel rojo plus se podría llegar incluso a limitar el acceso al monte de personas ajenas a la vigilancia y gestión de estos espacios. La DGA también restringe las actividades agrícolas, para las que establece franjas horarias, y las deportivas y lúdicas en entornos forestales cuando el riesgo sea muy alto (nivel rojo). Ambas alertas se determinan por municipios y las localidades afectadas se publicarán diariamente antes de las 12.00 en la página web del Gobierno de Aragón.
Así lo explicaron este martes el director general del Medio Natural y Gestión Forestal de la DGA, Jorge Crespo, y la directora general de Interior y Protección Civil, Carmen Sánchez, ambos en funciones. Dieron a conocer la orden conjunta de los departamentos de Presidencia y Medio Ambiente por la que se adapta el Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales (Procinfo) a la Ley de Montes que se modificó el pasado agosto.
Para llegar a un riesgo extremo deben cumplirse unas condiciones muy concretas de humedad relativa, temperatura y viento superior a los 30 kilómetros por hora. Crespo señaló que en los últimos años ha coincidido con episodios "de entrada de viento subsahariano". En 2022, comentó, la alerta rojo plus se habría declarado en cinco o seis ocasiones en zonas concretas, mientras en 2021 hubiera sido en tres.
Actividades esenciales
Cuando el peligro de fuego sea muy alto, una de las novedades es la prohibición de usar maquinaria y equipo que generen deflagración, chispas o descargas eléctricas en los montes y en las áreas rurales en una franja de 400 metros (una distancia que se fija para la mayoría de las restricciones). La excepción es que sirvan para la extinción de las llamas. Si esta norma hubiera existido en julio pasado, el fuego de Ateca no se habría producido ya que los trabajos de plantación de árboles no podrían haberse llevado a cabo.
En una situación de riesgo muy alto, la orden también prevé la autorización de actividades consideradas esenciales o de interés general para la Comunidad. Así, se podrá cosechar y empacar el cereal fuera de las horas centrales (entre las 14.00 y 18.00). Como medidas de precaución se garantizará el acceso rápido a la intervención de, al menos, un equipo con impulsión de agua de capacidad mínima de 1.000 metros o de un tractor provisto con apero de labranza tipo grada o similar. También se permite el uso de maquinaria agrícola para la siega o recogida de cultivos forrajeros en verde, así como otras labores de mantenimiento de los cultivos diferentes a la cosecha.
El manejo de ahumadores en la apicultura merece una regulación específica. No se pueden emplear entre las 12.00 y las 18.00 y deben ser portados en un recipiente metálico con un mecanismo hermético. Además, el asentamiento apícola tiene que contar con una faja cortafuegos perimetral, libre de vegetación susceptible de propagar las llamas, de al menos tres metros de ancho. El apicultor debe proveerse de una mochila extintora llena de agua de 15 litros como mínimo o un extintor de polvo (tipo ABC) de al menos tres kilos de carga.
Reparaciones urgentes
Hay tareas que se autorizan en momentos de riesgo extremo o muy alto tanto en el bosque como en las áreas rurales situadas a menos de 400 metros de él. Se trata de las reparaciones urgentes, imposibles de aplazar, para el restablecimiento de servicios básicos como infraestructuras viarias, de suministro y transporte de energía o de telecomunicaciones. Tienen que comunicarse previamente al 112 y llevarse a cabo con medidas de seguridad por parte de la empresa y medios para extinguir un fuego. Se recomienda evitar los trabajos entre las 12.00 y las 18.00.
En suelo urbano, los equipos que produzcan chispas, como una radial o maquinaria de jardinería, pueden emplearse a 100 metros de distancia del terreno forestal o en el interior de estancias de edificaciones cerradas con muros exteriores construidos con materiales no combustibles.
Las actividades deportivas también se restringen. Con un riesgo muy alto, las pruebas y los actos públicos previstos en un entorno forestal se suspenderán si no tienen previsto de forma expresa en la autorización las condiciones concretas para su celebración en este nivel de alerta rojo. Si el peligro es extremo, solo podrán desarrollarse si disponen de un plan específico contra incendios forestales aprobado por el departamento competente en protección civil.
El director general del Medio Natural apuntó que se han reunido con las asociaciones agrarias y defendió que con esta orden se busca "el equilibrio" entre el mantenimiento de actividades y las restricciones. La propia orden recoge que se podrán autorizar otras actividades que se estimen de "interés general" para la Comunidad y aquellas propias de la agricultura "cuya ejecución pueda considerarse ineludible por tener una importancia estratégtica para el sector".
