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La Hospedería de Arguis, un edificio en desuso que no encuentra quien lo quiera

Situado en el puerto de Monrepós, el complejo data de los años 40. Está cerrado desde 2007 y pertenece al Gobierno de Aragón, que lo intenta vender sin éxito.

La Hospedería de Arguis está en el puerto de Monrepós, a los pies del embalse del mismo nombre.
La Hospedería de Arguis está en el puerto de Monrepós, a los pies del embalse del mismo nombre.
Rafael Gobantes

Desde que se cerrara en 2007 nadie se ha interesado por comprar la Hospedería de Arguis para ponerla de nuevo en funcionamiento para este uso o para otro diferentes. Situado junto al embalse del mismo nombre, en pleno puerto de Monrepós, el inmueble pertenece al Gobierno de Aragón. En todo el tiempo que lleva en desuso, se ha sacado hasta tres veces a subasta por un precio de alrededor de un millón de euros, pero nunca se ha pujado por él. El complejo data de los años 40 del siglo pasado y primero funcionó como residencia. En los 80 pasó a ser propiedad del ejecutivo autonómico. De hecho, fue de los primeros edificios que se adquirió en propiedad para tener un espacio de residencia y como lugar de tiempo libre. Al principio, se destinó a usos relacionados con el bienestar social y la sanidad pero desde los 90, el edificio pasó a ser competencia de Turismo, convirtiéndose, en 1994, en la primera hospedería de la red de Aragón.

Durante un tiempo la Hospedería de Arguis vivió su época dorada, con muchos turistas que escogían este lugar para pasar sus vacaciones, llegados sobre todo desde Valencia y Cataluña. La consecuencia directa de este esplendor era la plantilla de alrededor de 25 personas que trabajaba en temporada alta. Había personal de limpieza y de lavandería, camareros, un conserje… tanto de Arguis como de los alrededores. El potencial del complejo es indudable. Situado en un entorno privilegiado, cuenta con 40 habitaciones distribuidas en dos plantas y la tercera, de tipo abuhardillado, destinada al servicio. El edificio dispone además de un amplio salón, un bar, cocina y hasta una zona que hacía las veces de capilla. Sin duda, una joya más para Arguis, una localidad de apenas 150 habitantes

Pero, por desgracia, esta joya hace demasiado tiempo que ya no brilla. En concreto, han pasado ya casi 16 años desde que sus puertas cerraran, quedando en su interior decenas de recuerdos y esa sensación de abandono que se palpa cuando las cosas se dejan a medias. De hecho, todavía se pueden encontrar las cartas de precios del bar o los pequeños carteles de “no molestar” que se cuelgan en las habitaciones de los hoteles. Quienes han conocido la hospedería cuando estaba abierta miran con nostalgia y cierta pena un sitio abandonado que, detrás de ese aspecto deteriorado, conserva todas sus posibilidades.

La parcela cuenta con 1.430 metros cuadrados de superficie y 2.815 construidos. Por su cercanía al embalse, todavía hay muchas personas que pasan por allí e incluso emplean la explanada de la puerta para aparcar. Esta ubicación hace que el complejo pueda ser atractivo para quienes practican la pesca u otras actividades de recreo. Además, Arguis se encuentra a las puertas del Pirineo, en un entorno montañoso, por lo que la hospedería es punto de partida de rutas de senderismo y BTT.

En busca de una solución

En el tiempo que lleva cerrada la Hospedería de Arguis se han puesto sobre la mesa propuestas como una residencia de ancianos o un hotel escuela pero ninguna de ellas ha salido adelante. El precio de venta del inmueble ronda el millón de euros, a lo que habría que sumar otra cuantía para rehabilitar o, cuanto menos, adecentar el edificio. Una arriesgada y elevada inversión que, para el alcalde de Arguis, es la causa principal de que la hospedería siga cerrada. “Creemos que se está dando una falta de respeto de las instituciones hacia este edificio y pedimos que la solución no pase obligatoriamente por venderlo, porque el empresario se juega mucho”, indica Afonso Gella, alcalde Arguis. Aunque el inmueble no es de su propiedad, desde el Ayuntamiento hacen todo lo que pueden para encontrar una solución y se habla de un régimen de alquiler, una cesión o algún tipo de colaboración público-privada que permita darle de nuevo vida a este lugar. “En esta legislatura hemos propuesto distintas opciones al Gobierno de Aragón e incluso hemos ido con personas privadas al lugar para que lo vieran”, explica.

Fruto de este trabajo municipal, actualmente el Ejecutivo Autonómico tiene sobre la mesa una propuesta en firme proveniente de la empresa privada para volver a dar uso a la hospedería, pero todavía no se ha resuelto nada. Mientras tanto, el complejo sigue cerrado y olvidado, y ya está siendo víctima de los primeros actos vandálicos. El tiempo corre en su contra y desde el Ayuntamiento de Arguis temen que la causa se dé por perdida y se acabe demoliendo el edificio.

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